Fondo Segunda
·19. Dezember 2025
Albacete: dependencia extrema en reparto del gol

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·19. Dezember 2025

El fútbol, al final, siempre termina en el mismo punto: el gol. Puedes tener orden, identidad y esfuerzo, pero si no repartes el peso de marcar, caminas sobre una cuerda floja. El Albacete Balompié lo sabe bien. Y los datos lo retratan con crudeza. Es el equipo de LaLiga Hypermotion con menos goleadores en lo que va de temporada: solo seis futbolistas han visto puerta.
Agus Medina, Jon Morcillo, Antonio Puertas, Jefté Betancor, Escriche y Lazo. Nadie más. Seis nombres para sostener toda una temporada. Seis piernas para empujar un proyecto que compite en una categoría donde la igualdad castiga cualquier desequilibrio estructural.
No es solo una estadística curiosa. Es una radiografía del equipo. Cuando el gol se concentra en tan pocos jugadores, el margen de error se reduce al mínimo. Una lesión, una sanción, un bajón de forma… y el sistema se resiente. El Albacete vive demasiado pendiente de que sus piezas ofensivas estén siempre disponibles y acertadas.
La consecuencia es clara: partidos atascados, encuentros en los que el plan se diluye si el guion no acompaña. Porque cuando el rival logra apagar a uno o dos focos, el equipo se queda sin luz. No hay segundas líneas que aparezcan con continuidad, ni defensas que sumen goles, ni centrocampistas con llegada regular.
Mirar al otro extremo de la tabla ayuda a entender el problema. El CD Castellón, sin ir más lejos, ha repartido sus goles entre 14 futbolistas distintos. Catorce. Eso habla de un equipo coral, imprevisible, capaz de encontrar soluciones desde cualquier rincón del campo.
No es solo talento individual, es estructura. Laterales que llegan, mediocentros que pisan área, extremos que suman y delanteros que no están solos. El Castellón no depende de una noche inspirada de uno o dos nombres. El Albacete, sí.
Y en una liga tan larga y exigente como LaLiga Hypermotion, esa diferencia pesa toneladas.
La pregunta es inevitable. ¿Falta calidad ofensiva o falta contexto para que aparezcan más goleadores? Probablemente haya un poco de todo. El Albacete ha construido un equipo competitivo, sólido por momentos, pero con un reparto de roles muy marcado. Hay jugadores pensados para destruir y otros para crear, pero pocos para llegar.

Eso condiciona el dibujo, el ritmo y la manera de atacar. Cuando el equipo se siente cómodo defendiendo bajo y saliendo rápido, el gol se concentra aún más en los mismos nombres. Y cuando toca llevar la iniciativa, cuesta encontrar alternativas.
La dependencia goleadora no solo afecta al presente. También condiciona el futuro. Si alguno de esos seis futbolistas baja su rendimiento o no continúa, el vacío puede ser enorme. Y el mercado no siempre ofrece soluciones rápidas ni baratas.
Además, los rivales toman nota. El Albacete es un equipo estudiado, previsible en ciertos patrones ofensivos. Y en Segunda División, cuando te conocen, te castigan.
El Albacete sigue vivo, compite y pelea. Pero los números no mienten. Repartir el gol no es un lujo, es una necesidad. Porque los equipos que aspiran a algo más que sobrevivir necesitan varias voces en ataque, no un único sol alrededor del que gire todo.
La temporada aún ofrece margen para corregir, para que aparezcan nuevos nombres, para que el gol deje de ser un privilegio de seis. Si no, el Albacete seguirá caminando con equilibrio… pero siempre con la sensación de que cualquier ráfaga puede hacerlo caer.









































