Araujo se sincera sobre la roja ante el PSG: "Al principio, sí que me persiguió..." | OneFootball

Ronald Araujo ha destapado la tirita y ha hablado sobre la herida del PSG. El barcelonismo, en una temporada decepcionante, se agarró a la vía europea para poder soñar. Tras eliminar al Nápoles realizando una gran fase de octavos de final, el conjunto de Luis Enrique se cruzó en su camino. En la ida, en el Parc des Princes, los pupilos de Xavi Hernández consiguieron un positivo 2-3. La vuelta, en Montjuic, fue una catástrofe en la que la crispación saltó por los aires (1-4).

Uno de los más damnificados por la descalificación fue el uruguayo. En un contraataque a toda velocidad, el de Rivera trató de frenar la carrera de Bradley Barcola y terminó derribándolo. En el minuto 29 y con un 1-0, el FC Barcelona se quedó con un futbolista menos, pues su central diestro acabó expulsado. Fue el principio del fin. A pesar de que el global era de 4-2 a favor del elenco blaugrana, la inferioridad numérica acabó con el anhelo europeo de los culés. Diez meses después, el protagonista de la acción, explicó cómo lo vivió para el diario SPORT.

"Borrón y cuenta nueva"

La defensa adelantada es uno de los sellos de Hansi Flick desde su llegada a Can Barça. Araujo, que llevaba seis meses parado por una lesión en el tendón isquiotibial de su muslo derecho, todavía tiene que acostumbrarse: "Tengo que estar bien para eso, físicamente. Sin duda, puedo llegar a los duelos, al espacio. Estos seis años que llevo en el Barça una de mis grandes virtudes ha sido esa, poder corregir, jugar con la línea adelantada. Claro que te ves importante en estos partidos. Más allá de que tengo 25, ya tengo cierta experiencia. Se ve reflejado en los partidos grandes, nunca me he escondido. La catástrofe del PSG pasó, pero me gustan esos partidos. Vamos a ver cómo voy sintiendo el feeling", relató el defensor.

Al mencionar el incidente con Bradley Barcola, la pregunta sobre el tema era obligatoria. No la esquivó el charrúa, que demostró haber cerrado la herida: "Al principio sí me persiguió, lo que quedaba de temporada sobre todo. Pero después ya con el tiempo lo fui olvidando, forma parte del pasado. Borrón y cuenta nueva. Hay una nueva historia por escribir. Los grandes son mentalmente fuertes y saben sobrepasar estas situaciones. Yo me considero uno de esos. No te negaré que después de aquello en Liga no estuve al nivel que suelo tener, pero a seguir. Queda mucho de carrera, por construir, por dar para este club", explicó.

Así pues, cargado de motivación y sin darle importancia a los fantasmas del pasado, Ronald está deseando tocar metal con el FC Barcelona. Recién renovado hasta 2031, está viviendo una situación idílica: "En 2017 estaba viviendo en mi pueblo. Me llegan a decir que ocho años después llevaría el brazalete de capitán del Barça y no me lo creo, claro". El uruguayo está listo para la acción.