Arturo Coello y Agustín Tapia vuelven a reinar en Burdeos | OneFootball

Los «Golden Boys» suman su título número 35 como pareja para despertar de nuevo la pesadilla de Galán y Chingotto (7-6 y 6-4)

Son los mejores, no hay más. Cuando Arturo Coello y Agustín Tapia entran a una pista de pádel, las opciones de que no salgan ganadores son mínimas. Si están a su mejor nivel, es mejor olvidarse y aceptar que te van a pasar por encima. Pero aún lejos de su mejor versión, lo más probable es que acaban desnivelando la balanza también a su favor. Es la ley de los «Golden Boys».

Este año todavía no han conseguido acercarse a esa imagen imparable y demoledora que arrasó en la segunda mitad del 2024. Pero eso no ha sido un impedimento para que a estas alturas de temporada lleven ya seis títulos en su casillero. Han estado presentes en diez torneos, por poner en contexto un reinado que sigue alcanzando marcas históricas.

Hoy, en el cierre del Bordeaux P2 y ante Alejandro Galán y Fede Chingotto, han conseguido una nueva victoria de peso. Un nuevo golpe sobre la mesa, otro portazo más en la cara de los número 2 y otro título que se suma a un palmarés que no deja de crecer. Ya van 35 títulos desde que unieron sus caminos Tapia y Coello, una dupla exitosa que ha salido vencedora en casi el 80% de las finales que han disputado (35 de 45).

Un clásico que nunca defrauda

La final de Burdeos no era una más en la rivalidad que existe entre ambas parejas. Galán y Chingotto se llevaron el último duelo, el del Major de Roma, para poner fin a una pesadilla que se extendía durante meses. Así que el torneo francés era una prueba para ver si los número 2 seguían rebelándose o Tapia-Coello volvían a imponer su dominio.

Como de costumbre, la igualdad ha reinado en un partido que se ha decidido por mínimo detalles. La primera manga es el mejor de los reflejos. Un tie-break en el que los dos binomios han tenido en su mano poder tomar ventaja con varias bolas de set y que se ha terminado decidiendo con un 14-12 en favor de Coello-Tapia. Sin duda, el mejor desenlace de un set entre los cuatro protagonistas en el amplio historial que les une.

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En la segunda manga Galán y Chingotto rompían pronto el saque rival para tratar de igualar la final, pero los número 1 tenían otros planes. Con Arturo Coello haciéndose gigante, recuperaban el break y ya, con 5-4 a favor, ponían la puntilla cerrando la final con otra rotura. Un 6-4 que es el broche de oro al Bordeaux P2 y que es el mejor de los mensajes hacia sus más inmediatos perseguidores. ¡Coello y Tapia son los reyes!