Crónica LaLiga EA Sports J38 | Villarreal CF 4-2 Sevilla FC | OneFootball

Indigno final de la esperpéntica temporada que ha realizado la plantilla que ha montado una dirección deportiva que está a años luz de lo que dejó el León de San Fernando

Nuevo espectáculo vergonzoso de un equipo incapaz de competir en ningún campo, y que hoy se va de La Cerámica dando gracias a Dios de que la puntería local no haya sido perfecta .

La tarde dominical comenzó con el susto por parte de Joaquín Caparrós y la alineación que dispuso para salir a jugar los últimos tres puntos en La Cerámica, jugando con Álvaro Fernández y Marcao como titulares.

Está situación provocó lo esperado, siete minutos en los que el Sevilla se dejó la cabeza en el vestuario y tanto Yeremy Pino como Pape Gueye adelantaban al conjunto groguets y daban un asiento de espectador privilegiado a la fiesta de la vuelta a Champions del conjunto de Marcelino García Toral.

Y con el paso de los minutos, la inoperancia sevillista tuvo un pequeño resurgir del único que ha ido tirando del carro en momentos claves, el gaditano Suso dispuso desde la derecha un buen centro medido a la testa del suizo, Djibril Sow, que en perfecto cabezazo batía la meta castellonense.

Pero gozo en el pozo, a los pocos minutos, una buena jugada del internacional español y capitán local, Alex Baena, se postulaba en el área tras regates a Kike Salas y batía, por su palo, a Álvaro Fernández y ponía el tercero con el que íbamos al descanso.

A la vuelta al fútbol tras el descanso, Caparrós daba entrada al belga Dodi Lukebakio por el suizo Djibril Sow que se marchó tocado.

Si bien el belga tuvo la primera ocasión pero se le fue alto, la gran diferencia entre ambas plantillas quedaba patente y antes de llegar a la hora de encuentro, un buen centro de Barry a Pape Gueye, batía a Álvaro y anotaba su primer doblete de su carrera profesional.

Los minutos finales de la temporada el Sevilla quiso y no pudo intimidar la meta de un Diego Conde que hoy tenía minutos y que tuvo muy poco trabajo ante las mínimas llegadas sevillistas, que llegaron en los últimos cinco minutos con un gol de Ramón Martínez y otro, al minuto, anulado a Dodi Lukebakio.

Con 41 puntos y una crisis institucional que ha influido en lo deportivo, tirando y pisando el escudo en las treinta y ocho jornadas disputadas y concluyendo en el puesto decimoséptimo a solo uno de los que se han ido a Segunda División, acaba una temporada para olvidar.

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