Fondo Segunda
·1. November 2025
El Racing y el arte de la puntería imposible

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·1. November 2025

El fútbol es caprichoso, rebelde. Capaz de convertir lo improbable en posible con una sola pincelada. Hay victorias que se escriben con dominación, otras con épica… Y algunas, muy pocas, con una eficacia quirúrgica que roza lo irracional.El Racing de Santander acaba de firmar una de esas. En la Jornada 12 de LaLiga Hypermotion, el conjunto cántabro logró ganar su partido con el único disparo a puerta que realizó en todo el encuentro. Un triunfo que desafía el manual, la estadística y hasta la lógica competitiva.
No es solo un dato curioso. Es una historia que merece ser contada, porque hay equipos que ganan atacando… Y otros que vencen golpeando justo cuando la vida te da una única bala. El Racing disparó una vez. Y acertó. Y le bastó con eso.
Lo extraordinario es que no es la primera vez que ocurre. Según registros estadísticos recientes contados por Stats Segunda en su cuenta de X, para encontrar el último encuentro en el que el Racing solo había realizado un tiro a puerta hay que viajar a la temporada 2023-24, cuando se enfrentó al Amorebieta como visitante. Entonces también venció, 0-1, con el único lanzamiento que encontró portería. El patrón se estira aún más atrás. La anterior vez en El Sardinero fue en la Jornada 38 de la 2022-23, ante el Granada. Y también terminó con victoria racinguista 1-0.
Tres partidos. Un solo tiro a puerta en cada uno de ellos. Tres victorias. No es casualidad. O quizá sí lo es, pero al Racing le sienta de maravilla.
Este tipo de victorias invitan a aplaudir la eficacia. Pero también a reflexionar sobre el modelo. En una categoría tan ajustada como LaLiga Hypermotion, donde los detalles deciden temporadas, vivir de tan poca producción ofensiva es un arma de doble filo.
Plataformas de análisis como Sofascore o Wyscout suelen mostrar que los equipos que ganan más partidos con registros tan bajos en ataque sufren para sostener la tendencia a largo plazo. Un gol puede ganar un partido. Pocas aproximaciones rara vez sostienen una temporada.

El Racing está mostrando capacidad de supervivencia competitiva y una virtud que no se entrena. Pegada emocional, esa que convierte la primera ocasión en un grito de victoria. Pero el fútbol es un mar largo, no una ola. Y la necesidad de generar más ocasiones será inevitable si el objetivo es mirar hacia arriba.
Pero si hay algo que no reflejan los números es la personalidad. Ganar así no es solo fortuna. Habla de estar cómodo en el barro, de saber manejar un partido igualado. De no temblar en escenarios tensos. Equipos con alma suelen construir grandes temporadas incluso sin brillo constante, porque encuentran la forma de golpear cuando más cuesta respirar.
El Racing ha demostrado carácter. Al fin también una defensa que sostiene. Y una convicción que pocas veces se ve en Segunda: si llega una oportunidad, no se perdona. Es un rasgo de madurez competitiva —ese que separa a los equipos simpáticos de los equipos peligrosos—. Y LaLiga Hypermotion premia precisamente eso.
El triunfo con un único tiro a puerta no debería ser la norma, pero sí un recordatorio. De que los puntos valen igual cuando se ganan con 20 remates que con uno. De que el Racing tiene capacidad para resistir, competir y creer hasta el último suspiro. Y también de que el margen de mejora está ahí, evidente, esperando ser conquistado.
Porque si con tan poco el Racing suma de tres… ¿Qué pasará cuando afine el plan ofensivo y encuentre más caminos hacia el área? A veces, el fútbol concede solo una bala. Lo importante es no fallar. El Racing apuntó. Disparó. Y volvió a escribir una victoria que no se explica… Simplemente se siente.









































