Da igual la pelota
·28. November 2024
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Mbappé siendo derribado por Conor Bradley en el partido del Real Madrid en Champions contra el Liverpool | Fuente Justin Setterfield/Getty Images
El Real Madrid esta temporada está siendo un espejismo de lo que nos ha acostumbrado a ver los últimos años. Los merengues son un equipo que no consigue arrancar y hacer trabajar a la constelación de estrellas que cuentan en su plantilla. Aunque la situación en liga no es tan mala, al estar a 4 puntos del líder con un partido menos, en su competición fetiche: la Liga de Campeones, están cuajando una actuación muy deficiente.
Tras las 3 derrotas ante el Lille, Milán y Liverpool, el Madrid está en la posición 24 de la fase de liga, que es la que cierra la clasificación a la ronda preliminar. Sin dudas es una posición para nada esperada, más aún con las enormes expectativas que suscitaba este equipo. Es por ello que vamos a intentar dilucidar cuales son las claves para esta debacle del Campeón de Europa.
Muchos ya apuntan a «Carletto» como el principal culpable de la falta de competitividad del Real Madrid. A diferencia de la pasada campaña, en la que reinventó a Bellingham como un mediapunta letal en el área y consolidó la mejor defensa de toda Europa, con Mendy, Carvajal, Rudiger y Nacho, en esta 24/25 no existen trazas de dicha solidez en defensa, ni de jugadores diferenciales de cara a gol (Excepto Vinícius).
Ancelotti en el banquillo del Bernabéu, en la derrota ante el AC Milan en el partido de Champions de esta temporada |Fuente Angel Martinez/Getty Images
Pero la principal diferencia de este año es que Carlo Ancelotti no ha sabido recomponer a su mediocampo tras la perdida de Toni Kroos. La retirada de la leyenda alemana a supuesto un profundo vacío. El entrenador italiano ha probado a varios jugadores que acompañen a Fede Valverde y sean capaces de realizar la función de organizador y director del juego. Ha intentado colocar a Bellingham en esa posición, resultando en el empeoramiento del rendimiento del inglés; a Luka Modric, que a sus 39 años no ha podido alcanzar el rendimiento que ofrecía Kroos; Ceballos, que ha estado muy lejos de ofrecer el perfil requerido en esa posición y podríamos seguir buscando, pero no existe un reemplazo para la leyenda teutona.
Respecto a la defensa, principalmente la terrible baja de Carvajal y el bajón de nivel de Mendy han debilitado con creces el rendimiento defensivo del Madrid. En el caso de Carvajal, el Real Madrid no tiene ningún jugador que pueda suplirle en sus funciones, Lucas Vázquez está lejos de ofrecer las garantías que ofrece el jugador de Leganés. Respecto a Mendy, su principal valor como lateral, que es su gran capacidad defensiva, se ha visto mermada enormemente, un ejemplo claro es como Mohammed Salah, en un partido discreto del egipcio, consiguió trastocar al lateral francés, forzando un penalti.
Es evidente que Ancelotti no ha sido capaz de reponerse ante las debilidades que ha padecido su equipo a lo largo de la temporada, pero el mayor foco de atención respecto al mal rendimiento del Real Madrid se ha centrado en un solo jugador, y con este mismo hay que extenderse.
O eso diría Florentino tras ver ayer la nefasta actuación del crack de Bondy ante el Liverpool, que una vez más ha estado muy alejado a lo que el Real Madrid pide de él. Porque Mbappé ha demostrado con creces a lo largo de su trayectoria que es un Galáctico, el gran Galáctico que buscaba el presidente madridista tras la marcha de Cristiano Ronaldo. Con actuaciones ya históricas en los Mundiales de 2018 y 2022, su despegue como estrella mundial en el Mónaco y posteriormente siendo la cara del PSG. Porque lo que la afición merengue le pide al francés es que haga lo que hacía en Francia, desequilibrar a los defensas con su velocidad inalcanzable y su regate eléctrico. Que sea ese jugador que hacía temblar a gigantes como el Madrid y el Barça cuando se les ponía enfrente.
Ese es el Mbappé que quería el Madrid, y de él esta temporada se ha visto muy poco, por no decir nada. Primero respecto a su capacidad goleadora, Kylian ha anotado 8 goles en 17 partidos siendo 3 de ellos de penalti. Esto supone un gran bajón en su cuota goleadora, sobre todo si lo comparamos con su última campaña en París, en la que anotó 44 goles en 48 encuentros.
Mbappé y la parada de Kelleher, en el partido de ayer Real Madrid-Liverpool en Champions | Fuente Justin Setterfield/Getty Images
Respecto a su rendimiento en general en el terreno de juego, el mayor condicionante que ha sufrido el galo es su posición en el campo. El Real Madrid y especialmente Ancelotti tenían el reto de acomodar a dos superestrellas en la delantera: Vinícius y Mbappé, siendo ambos de perfiles parecidos. Dos jugadores que suelen jugar mejor escorados en la banda izquierda, que entran desde la banda hacia el área. Con este dilema se prefirió colocar a Mbappé en la delantera y mantener a Vini en la banda izquierda.
Pero ya ha quedado demostrado que esto no funciona, porque en vez de aportar más a la producción ofensiva del Madrid, parece que Mbappé le está quitando contundencia y capacidad goleadora. Mbappé no se siente cómodo jugando de delantero centro, parece totalmente perdido, fuera de posición. Y esto es un profundo problema a corto, medio y largo plazo. Porque si Mbappé no funciona en esa posición, el Madrid va a tener que ponerse ante el dilema de a quien se le debe dar mayor prioridad, a Vinícius, el jugador que se hizo estrella mundial tras trabajar durante años en Valdedebas o Mbappé, la estrella ya consolidada que está destinada a seguir gobernando el planeta fútbol los próximos 10 años.
Veremos como consigue el Madrid recuperar al Mbappé que todos conocemos, pero lo necesita urgentemente si quiere seguir aspirando a hacer cosas grandes, a seguir el estándar que requiere el club más laureado de la historia.
Por último, un factor clave para entender el estado de forma del Real Madrid es su calvario con las lesiones. Desde el inicio de la temporada en Agosto, han sido numerosas las bajas por lesión del conjunto blanco.
En la actualidad el Madrid no puede contar con Carvajal y Militao para toda la temporada; Alaba y Jacobo Ramón hasta el próximo enero; Vinícius, Tchouaméni y recientemente Camavinga hasta el mes que viene y Rodrygo, que vuelve de lesión esta semana. Estas son solo las lesiones actuales, pero en estos meses también han tenido que pasar por el hospital Courtois, Ceballos, Mendy, Brahim y Mbappé entre otros.
Pero a pesar de que en este fútbol moderno es normal tener numerosas lesiones, muchas de ellas de gravedad, si que es cierto que desde el año pasado el Madrid ha sufrido en especial de este mal. El ejemplo claro es el de Militao, que por segundo año consecutivo ha sufrido una lesión de ligamentos cruzados, perdiéndose ambas temporadas.
Por todas estas lesiones es evidente que hay que buscar responsables de estas lesiones, muchos miran hacia Pintus, el célebre preparador físico que a lo largo de los años ha demostrado saber poner a punto a los jugadores del Madrid de una forma única, pero parece que tras los cambios de calendario y la carga de partidos actual no sería la preparación más adecuada, derivando así en las numerosas lesiones que están ocurriendo.
Sin dudas muy pocas personas esperaban que un equipo que venía de ser el mayor dominador del fútbol un año más, ganador de Champions y Liga, que además sumaba en sus filas al mayor talento de esta generación como es Kylian Mbappé, haya terminado sufriendo tanto, siendo incapaz de encontrar una identidad en su juego. Un equipo vulnerable en los partidos clave, como en el clásico ante el Barça o el partido de ayer ante el Liverpool.
Nadie esperaba que la temporada iba a tener tantos sobresaltos en la capital de España, pero aún estando vivo en todas las competiciones y con el primer título ganado ante la Atalanta en agosto, el Real Madrid debe cambiar mucho y solucionar todos estos problemas si quiere seguir ostentando el trono de Rey de Europa.
Autor: Alejandro García
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