Fede Valverde se acercó a Raphinha y le dejó pasmado: '¿Lo dices en serio?' | OneFootball

Acabó el partido y los jugadores del Barça estaban exultantes. Campeones de Copa. La formación de los niños frente al mejor equipo del mundo.

Lógico que lo celebraran por todo lo alto. Viniendo de haber ganado la Supercopa ante el mismo rival, al que han ganado cuatro veces esta temporada, las dos últimas por 0-4 y 2-5.

Al término de la final se desató la euforia entre los jugadores barcelonistas. Y Fede Valverde le echó en cara a Raphinha sus saltos de alegría. "¿Lo dices en serio?" le preguntó.

Lo decía en serio. Había que tener consideración con el perdedor. El brasileño se quedó perplejo y le hizo caso, cesó en sus gestos de celebración.

El doble rasero de Valverde

Lo que no sabía Raphinha es cómo las gasta Fede Valverde cuando el triunfo le sonríe. Entonces no hace falta guardar ningún tipo de consideración con el rival y hay que dar rienda suelta a la euforia.

El Barça de los niños, con siete jugadores seleccionables para La Roja, por tres del Real Madrid, calló muchas bocas. Después de una semana recibiendo desprecios del aparato de propaganda mediático del Real Madrid, necesitaban desahogarse. Y lo hicieron, aunque a Valverde le supiera mal.

Nadie le negó la mano a nadie, como hizo Bellingham en el pasillo que los jugadores del Barça abrieron a su rival. Nadie insultó al árbitro, nadie le lanzó nada al colegiado... Fue un triunfo que no dejó dudas.

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Triunfo inapelable sin jugadas polémicas

Los tres goles del Barça, legales. Sin necesidad de penaltis ni expulsiones del rival. Once contra once.

Y si a alguien perjudicó el árbitro fue al Barça, privándole de cinco penaltis que se cometieron en el área del Real Madrid. De eso no habla Real Madrid TV, la tele que lleva la firma de Florentino Pérez.

Ni de los feos gestos de Mbappé, Tchouaméni, Rüdiger y Ceballos que pudieron haber sido expulsado perfectamente.

La final ya es historia y deja el recuerdo de este gesto de Valverde dando lecciones de deportividad. Como si él fuera un maestro en la materia.