Jugadores con pasado y presente tanto en Boca como en Atlético Tucumán | OneFootball

La historia entre Boca Juniors y Atlético Tucumán no solo se escribe en los enfrentamientos dentro del campo de juego, sino también en los recorridos de varios futbolistas que han vestido ambas camisetas. En la actualidad, el plantel del Decano cuenta con dos jugadores con vínculo directo con el Xeneize, reflejo de una conexión que se ha repetido a lo largo de las décadas.

Uno de ellos es el volante Adrián Sánchez, nacido en 1999, quien fue adquirido en un 65% de su pase por Atlético Tucumán, luego de que la institución tucumana pagara 500.000 dólares a Boca Juniors. Sánchez, surgido de las inferiores boquenses, busca consolidarse como una pieza clave en el mediocampo del equipo del norte argentino.

El otro es Julián Carrasco, mediapunta nacido en 2002, quien llegó a préstamo desde Boca y permanecerá en Atlético Tucumán hasta fines de este año. Con pasado en las divisiones juveniles del Xeneize, Carrasco representa una de las apuestas jóvenes del Decano para esta temporada.

Este lazo entre clubes también tiene un componente histórico. Varios futbolistas han defendido ambas camisetas, entre ellos nombres recordados como Luciano Monzón, lateral izquierdo surgido en Boca que tuvo un paso por el conjunto tucumano; Alfredo Graciani, querido goleador xeneize que también dejó su huella en Atlético; Julio Buffarini, campeón con Boca y con un breve ciclo en el norte; Hugo Guerra, delantero uruguayo con goles en los dos clubes; y Emmanuel Gigliotti, otro artillero que supo dejar su marca en La Bombonera y también en el Monumental José Fierro.

Esta lista, que podría seguir, da cuenta de un vínculo constante entre dos instituciones con realidades diferentes, pero con caminos que se cruzan más seguido de lo que podría suponerse.