Otro quebradero de cabeza para Almeyda | OneFootball

El próximo sábado 1 de noviembre a las 16:15 horas, el Sevilla FC buscará cosechar buenas noticias ante el Atlético de Madrid en el Estadio Metropolitano, en un encuentro correspondiente a la jornada 11 de LaLiga EA Sports. Será un examen exigente para el conjunto andaluz, que llega con la esperanza de recuperar sensaciones tras un inicio de campeonato irregular. Sin embargo, Matías Almeyda afronta un nuevo contratiempo: la no disponibilidad de Lucien Agoumé, sancionado por acumulación de tarjetas amarillas.

Lucien Agoumé en el encuentro ante el Marsella. | Imagen: Sevilla FC

Lucien Agoumé, pieza esencial en el proyecto

Desde la llegada de Matías Almeyda al banquillo, Lucien Agoumé se ha consolidado como el corazón táctico del equipo. Su papel como eje defensivo y primer constructor del juego lo ha hecho casi imprescindible en las alineaciones y su capacidad para cortar jugadas, distribuir con criterio y liderar la presión lo han convertido en un referente silencioso dentro del vestuario. Además, el joven francés representa el tipo de centrocampista que el técnico busca: energía, compromiso y capacidad para sostener el ritmo alto de los partidos. No es de extrañar que, dentro del entorno del Sevilla FC, Agoumé se haya convertido en una de las mejores “noticias” de la temporada, símbolo de la estabilidad y el carácter que Almeyda intenta imprimir al equipo.

Una baja que trastoca los planes del Sevilla FC

La sanción de Lucien Agoumé llega en un momento en el que el conjunto necesita encontrar cierta estabilidad, lo que obliga al técnico a replantear su estrategia ante un rival que destaca precisamente por dominar el centro del campo. Además, la situación se agrava con la lesión de Baptista Mendy, otro futbolista de perfil similar que sigue sin estar disponible. Con ambos fuera de combate, el Sevilla FC pierde equilibrio y presencia física en una zona clave del terreno de juego. Almeyda deberá decidir si mantiene su idea habitual de presión y recuperación rápida o si apuesta por un planteamiento más conservador.

Un síntoma de las limitaciones de plantilla

Más allá del caso puntual, esta situación vuelve a evidenciar los problemas estructurales del club hispalense en su zona medular. Las restricciones económicas han impedido incorporar más refuerzos y el margen de maniobra es mínimo. Matías Almeyda, que ha logrado devolver el carácter al grupo, deberá recurrir al ingenio para suplir la necesidad de efectivos sin alterar el espíritu competitivo. El duelo ante el Atlético de Madrid será, por tanto, más que un partido: será una prueba de resistencia para un Sevilla FC que busca reafirmarse en medio de las dificultades y conseguir mejores noticias. Superar la ausencia de Lucien Agoumé no será sencillo, pero hacerlo con éxito podría reforzar la confianza de un equipo que aún persigue su mejor versión.