Fondo Segunda
·7 September 2025
El Burgos CF aún mueve ficha tras el cierre de mercado

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·7 September 2025
El mercado estival en España ya bajó el telón. Pero en Burgos la actividad no se detiene. El Burgos CF acaba de cerrar la salida de Milicic. Un central serbio que aterrizó en El Plantío con la etiqueta de ser una de las grandes promesas defensivas de su país. Sin embargo, el fútbol no entiende de etiquetas. Y lo que parecía un inicio ilusionante acabó convirtiéndose en un capítulo fugaz. 21 años, cero partidos oficiales y un billete de vuelta a Serbia.
El joven zaguero regresa al FK Radnicki 1923, club de la Superliga serbia. Allí buscará minutos, confianza y una trayectoria que aún tiene mucho por escribir. En Burgos deja más preguntas que respuestas. Un paso testimonial que recuerda que el fútbol es también un deporte de oportunidades. Que, si no llegan a tiempo, se desvanecen sin hacer ruido.
Pero la verdadera expectación en el entorno burgalés no gira únicamente en torno a Milicic. El nombre que acapara miradas es el de Anderson Arroyo. Central colombiano de 24 años, cedido en su día por el Liverpool. Y que se ha consolidado como un pilar de la defensa castellana. Su rendimiento en las dos últimas temporadas ha despertado interés fuera de España. Y en El Plantío saben que el zaguero cafetero puede dejar una de las ventas más elevadas en la historia del club.
De confirmarse la operación, el Burgos no solo daría un salto económico relevante, sino que también afrontaría el reto deportivo de cubrir un hueco de jerarquía en la retaguardia. Arroyo ha disputado más de 60 partidos oficiales con la camiseta blanquinegra y se ha ganado el reconocimiento de una afición que lo ve como uno de los futbolistas más solventes y regulares de los últimos años.
Los movimientos actuales reflejan un Burgos CF en crecimiento, consciente de que para asentarse en LaLiga Hypermotion debe conjugar presente y futuro. Salidas como la de Milicic son parte del aprendizaje; posibles ventas como la de Arroyo, una prueba de madurez institucional.
El Plantío late fuerte porque sabe que, más allá de nombres propios, el proyecto sigue avanzando. En un club que ha aprendido a sobrevivir y soñar a partes iguales, cada decisión es una apuesta por seguir escribiendo su historia en el fútbol profesional.