Fondo Segunda
·2 August 2025
El Cádiz cuenta con un talento escandaloso

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·2 August 2025
En un equipo con hambre, cualquier chispa puede encender la mecha. Y si hay un jugador con capacidad de encender estadios con una simple caricia al balón, ese es Javi Ontiveros. El malagueño, de vuelta en el Cádiz CF tras una etapa marcada por la irregularidad y las dudas, ha reaparecido en esta pretemporada con un brillo en los ojos que recuerda al chico que deslumbró en La Rosaleda. Su zurda vuelve a sonar como sinfonía en Carranza. Y con ella, las esperanzas de un Cádiz que, tras aquel descenso, busca su camino de regreso a la élite.
Ontiveros no ha tenido un camino sencillo. Tras su paso por el Villarreal, su progresión se vio entorpecida por lesiones, cesiones sin continuidad y esa etiqueta de «promesa eterna» que tanto pesa. La categoría, más cercana a su contexto competitivo, le ofrece la oportunidad perfecta para redimirse. Y la pretemporada no ha hecho más que confirmar las sensaciones: está enchufado. Implicado. Y, sobre todo, inspirado.
En los primeros amistosos del verano, Ontiveros estuvo ausente. Unas molestias no le permitieron ser de la partida. Sin embargo, regresó esta semana y dejó detalles de futbolista diferencial. De jugador diferente, sensacional.
A sus 27 años, Ontiveros ya no es un proyecto. Es una realidad que quiere volver a ser protagonista. Y el contexto de la Segunda puede beneficiarle como pocos. Espacios más abiertos, defensas menos asentadas y equipos que conceden más cuando se arriesga. En ese escenario, su desequilibrio, su golpeo y su visión pueden ser letales. Además, cuenta con la plena confianza de Gaizka Garitano, un técnico que sabe cómo explotar el talento de jugadores con chispa.
Tras un año complicado, el Cádiz inicia la temporada 2025-26 con una plantilla renovada, una afición exigente y un objetivo claro: el ascenso. Para lograrlo, necesita recuperar gol, creatividad y valentía ofensiva. El protagonismo en ataque va a necesitar de líderes. Y de ese perfil ha dotado el club a su plantilla. Ontiveros es uno de esos futbolistas que marcan el camino.
Foto: Diario de Cádiz
La falta de imaginación y ritmo en los últimos metros fue uno de los grandes males del equipo. Ontiveros, con su perfil de mediapunta reconvertido en extremo libre, puede llenar ese vacío. Su capacidad para generar ocasiones de la nada y su buen golpeo desde media distancia pueden ofrecer al equipo un recurso que ha echado en falta durante demasiado tiempo.
El ascenso es una carrera de fondo. Y en esa carrera, no solo se necesita solidez defensiva o físico. También instantes de genio. Esos que cambian partidos. Ontiveros los tiene. El Cádiz lo sabe. La afición lo intuye. Y él parece más dispuesto que nunca a demostrarlo. Porque ya tocó fondo. Y desde ahí solo le quedó mirar hacia arriba.
Su reaparición no es solo una buena noticia en lo deportivo, también lo es en lo emocional. Ontiveros siempre ha sido un jugador que conecta con la grada. Que levanta a los suyos con un amague, una bicicleta o un disparo que huele a gol desde que sale de su pie izquierdo. Si logra mantener la regularidad, puede convertirse en el faro del equipo. En el alma de una remontada colectiva que va más allá de los resultados.
En Cádiz se respira fútbol, pasión, sufrimiento. Y también esperanza. Este año, esa esperanza tiene forma de zurda. Se llama Javi Ontiveros. Y está listo para volver a ser él.
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