El emotivo adiós a La Romareda: récords, llenos y un futuro incierto | OneFootball

La temporada 2024-25 ha marcado el final de una era en La Romareda, con el veterano estadio blanquillo acogiendo sus últimos encuentros antes de una importante remodelación que durará dos años. Los datos oficiales compartidos por el club y medios locales revelan que el Real Zaragoza reunió una media de 18.358 espectadores por partido en los 22 encuentros oficiales jugados como local: 21 de LaLiga Hypermotion y uno de Copa del Rey.

Este promedio representa una caída sensible respecto a la pasada campaña, cuando el equipo promedió 22.536 asistentes, aunque apenas baja de los 18.611 registrados hace dos cursos. Si se atiende solo a los partidos de liga, la cifra de este año (18.748) sería incluso ligeramente superior a la de hace dos temporadas. La suma total de asistentes en toda la temporada alcanzó los 403.868 aficionados, superando los datos previos a excepción de la última campaña.

La reducción en la media de público encuentra explicación principalmente en las obras en la zona de Gol Sur, que han reducido la capacidad operativa del estadio a unos 24.000 espectadores. Sin embargo, el porcentaje de ocupación se ha mantenido elevado, subrayando el respaldo constante de la afición zaragocista pese a las limitaciones de aforo y los desafíos deportivos del club.

El ambiente en La Romareda ha sido notable, destacando especialmente las cuatro ocasiones en que se colgó el cartel de “entradas agotadas”. Las mejores entradas correspondieron a los encuentros ante Racing de Santander, Mirandés, SD Eibar y, sobre todo, el duelo final frente al Deportivo de La Coruña, que selló la permanencia y despidió el estadio con 24.007 espectadores presentes.

Con estos números, La Romareda ha vuelto a situarse entre los estadios más visitados de la Segunda División, un dato que resalta el peso social de la entidad en el fútbol profesional español. A partir del próximo mes de agosto, el Real Zaragoza disputará sus partidos como local en un estadio provisional ubicado en los terrenos de la Expo, mientras avanzan las obras del nuevo campo.

El club inicia así una nueva etapa fuera de su feudo habitual, con el reto de mantener el apoyo masivo de sus seguidores en un escenario distinto. La fidelidad mostrada por la afición durante un año de transición será clave para afrontar este traslado temporal y el futuro regreso a una Romareda renovada.

Source: Real Zaragoza, Aragón Digital