PanamaGol.com
·19 May 2025
Goodison Park cierra sus puertas después de 133 años de historia

In partnership with
Yahoo sportsPanamaGol.com
·19 May 2025
En medio de una atmósfera cargada de emoción y nostalgia, el Everton Football Club disputó su último partido oficial en Goodison Park, su casa durante 133 años. Lo hizo con una victoria por 2-0 frente al Southampton, pero más allá del resultado, fue una jornada de despedida. Una ceremonia sentida que marcó el final de una era.
Las lágrimas de los aficionados ‘Toffees’ acompañaron cada momento del partido, conscientes de que los históricos accesos azules de Gwladys Street no volverán a abrirse para el primer equipo masculino. En su lugar, el club mudará su actividad principal al nuevo Everton Stadium, un moderno recinto de 55.000 espectadores a orillas del río Mersey, que promete innovación pero deja atrás la magia irrepetible de Goodison.
Ubicado entre Stanley Park y la iglesia de St Luke, el viejo estadio ha sido un emblema del barrio de Walton y del fútbol inglés. Desde su construcción en 1892, tras la ruptura del Everton con John Houlding y el posterior nacimiento del Liverpool FC, Goodison Park ha sido escenario de gloria, frustraciones, grandes noches europeas y también una rivalidad que ha marcado a toda una ciudad.
La historia de Goodison se remonta a una fractura crucial en el fútbol británico. Entre 1884 y 1892, el Everton jugaba en Anfield, actual hogar del Liverpool. Sin embargo, conflictos administrativos con Houlding forzaron al club a buscar un nuevo hogar, lo que dio origen tanto a Goodison Park como al Liverpool Football Club.
Desde entonces, el azul comenzó a escribir su historia. Por su césped han pasado leyendas eternas como Dixie Dean, autor de 390 goles con los ‘Toffees’, incluidos 60 en una sola temporada, una marca que ni Haaland ha podido igualar. Campeón de dos ligas, una FA Cup y dos Charity Shields, su estatua en los alrededores del estadio recuerda la época en que el Everton dominaba Inglaterra.
Una de las gestas más recordadas por los aficionados fue el partido ante el Bayern de Múnich en 1985, durante las semifinales de la Recopa. Aquella noche, Goodison rugió con fuerza y acompañó al equipo de Howard Kendall hacia la única corona europea del club, lograda tras vencer al Rapid de Viena en la final. Kendall, otro ícono del Everton, también tiene una estatua, justo frente a la iglesia que durante años compartió vibraciones con el estadio.
La década de los 80 fue la más gloriosa en la historia reciente del Everton: dos títulos ligueros, una FA Cup y tres Charity Shields consolidaron a los ‘Blues’ como una potencia europea.
Photo by Carl Recine/Getty Images
Aunque los trofeos han escaseado en las últimas décadas, Goodison Park nunca perdió su alma. La pasión de su afición se mantuvo intacta, como quedó demostrado en episodios inolvidables como el derbi de FA Cup en 1991, cuando el Everton eliminó al Liverpool tras tres partidos, o el más reciente en febrero de 2025, con un empate agónico 2-2 ante los ‘Reds’ tras un gol de Tarkowski en el minuto 98, una noche que pareció escrita para despedirse con gloria.
A pesar de la mudanza del primer equipo, el Everton ha decidido preservar su esencia: el estadio no será demolido y se convertirá en la nueva sede del Everton Femenino, asegurando así la continuidad de una instalación que representa algo más que un campo de fútbol.
La última jornada en Goodison fue un acto de respeto, memoria y orgullo. Una despedida que no deja vacío, sino legado. El nuevo estadio podrá ofrecer más comodidad y tecnología, pero para los miles que han sentido cómo el suelo temblaba en Walton, Goodison Park será siempre el verdadero hogar.