Nery Pumpido fue contudente: «El salto de calidad de Unión es la Libertadores o el campeonato» | OneFootball

El día invitaba a estar al aire libre aunque con una necesaria aclaración: debajo de un árbol y a la sombra. El calor ya quemaba en el mediodía de esta implacable Asunción del Paraguay, que no oculta en su cartelería distribuida estratégicamente por toda la geografía de la ciudad, los anuncios y la tradicional «cuenta regresiva» electrónica para la final de la Sudamericana, donde esperan una invasión de argentinos y también de brasileños para ese esperado choque entre Racing y Cruzeiro.

Inevitablemente, afloran también los recuerdos de la movilización de Colón, de hace cinco años, que marcó un hito imposible de igualar: se necesitará un equipo con altísima capacidad de convocatoria, que juegue la final en un país limítrofe y ante un rival casi sin hinchas. Se le dio a Colón y llenó la «Nueva Olla», mismo escenario para la final del sábado que viene.

«¿Ya estás acá?… Te mando a buscar a la puerta y venite a la cancha principal, que está entrenando el equipo de Juampi», fue el pedido de Nery Pumpido. Sportivo Luqueño se quedó afuera de la Copa Paraguay perdiendo en semifinales y ahora jugará por el tercer puesto. Allí juega «Tito» Torres, aquel zurdo que vistió la camiseta de Colón y que recuerda con cariño aquellos tiempos en Santa Fe. Y Nery no puede con su genio y se fue a ver el entrenamiento del equipo que dirige su hijo, ya afianzado en Paraguay y sin planes inmediatos de regreso a la Argentina.

La Conmebol tiene ese movimiento febril de una empresa, porque eso es lo que es, una gran empresa. Y funciona de esa manera, gestionando, generando ingresos cada vez más fuertes de los que Nery habla y compara, inclusive, con lo que pasa en Europa.

-Arranquemos por el partido, Nery. Todos de alguna manera imaginábamos un partido duro. ¿Vos también?, ¿hay algo que te sorprendió?

-No, porque Paraguay venía jugando bien, mejorando mucho. La gente venía golpeada, no iba a los estadios y desde que asumió Alfaro cambió todo. Cambió el ánimo de los jugadores y también de la gente. Paraguay estuvo bien parado y a la Argentina se le complicó llegar.

-¿Cuesta mantener el nivel en estas Eliminatorias? Te lo pregunto porque de los últimos cuatro partidos, Argentina perdió dos y con rendimientos muy contradictorios…

-Pasa mucho por la concentración de los jugadores. En estas Eliminatorias son siete los equipos que clasifican y la Argentina está muy bien posicionada. Entonces, muchas veces y de manera inconsciente se cree que ya está todo listo. Y es lógico que pase, porque con los puntos que tiene la Argentina, hay un 80 por ciento de posibilidades de que clasifique.

Fútbol argentino -Sigamos por otro tema que está en el tapete en el fútbol argentino. ¿Qué sentiste cuando pasó lo que pasó con Buhajeruk, el jugador de Riestra?

-Es la opinión generalizada de todos… Esto no puede pasar y el fútbol no merece estas cosas. Sabemos que se trabaja mucho en las redes sociales hoy en día y posiblemente habrá un rédito económico pero eso no justifica lo que pasó… Y también coincido con lo expresado por la gran mayoría, en el sentido de que uno se ha «matado» por hacer el recorrido y algún día llegar y debutar en Primera, guardando a ese día como el más especial e histórico, y ver algo así no es una linda sensación.

-Claro, el trayecto necesario…

-Es que yo al pibe no le apunto… El no tiene la culpa de lo que pasó… O en todo caso, es el menos culpable.

-¿Lo vinculás con el tema sociedades anónimas deportivas?

-… ¡Pero no pasó en otros lados, pasó sólo ahí!… No es algo general y podría pasar en clubes que no se manejan bajo el perfil de sociedades anónimas.

-Pero le hace mal al fútbol argentino…

-Yo creo que sí… Esperemos que se erradique y que haya una sanción ejemplar.

-¿Está bien como está el fútbol argentino?, ¿atenta contra el nivel futbolístico que haya tantos equipos en Primera y en la Primera Nacional?

-No sé si atenta contra el nivel futbolístico… Los últimos torneos fueron con un final bárbaro, llegan muchos equipos a competir en la parte final… Con menos equipos, quizás los clubes tengan más dinero, pero aún así fijáte que los finales de campeonato en los últimos tiempos han sido muy buenos… Yo lo que veo es que los torneos se destacan cuando todos tienen algo por pelear, ya sea arriba o abajo, pero siempre con cosas para pelear.

-¿Quiere decir algo que haya tres equipos brasileños y uno solo de Argentina para definir los dos torneos del continente?

-No… Todos pensamos que lo económico de Brasil y trayendo jugadores del extranjero, los ayuda a desnivelar. Pero si te ponés a mirar con detenimiento, vas a ver que los jugadores que vinieron a Brasil desde Europa no son los que desnivelan, sino que lo hacen los mismos jugadores brasileños que están en un muy buen nivel… Y además, por el trabajo que se está haciendo a nivel clubes en todo Brasil. La diferencia no está en los que vienen de Europa, sino que la diferencia están en los brasileños que están ahí y en algunos sudamericanos que van a Brasil y que andan muy bien…

Respecto del nivel económico, a eso no lo discuto. El que tiene dinero saca diferencias… Pero no pasa sólo en Brasil, sino que también pasa en otros lugares como en España o Inglaterra.

-¿Sostenés que es más duro el fútbol argentino que el europeo?

-Alguna vez te dije que me gusta más ver el fútbol sudamericano que el europeo… Y lo sostengo… La verdad es que me aburro bastante viendo partidos de algunos lugares de Europa y no me pasa eso con los partidos en Sudamérica… Algunos le echan la culpa a Guardiola, tiene un plantel de 1.500 millones de dólares y un plantel extraordinario… ¡Guardiola no tiene la culpa, sino que la culpa es de aquellos que lo copian y no tienen un plantel de 1.500 palos verdes!… Los que copian son los que se equivocan…

-¿Y qué hay que hacer?

-¿Qué hay que hacer?… No creer que a los chicos de 10, 11 o 12 años hay que decirles que deben jugar a dos toques… Si vienen a buscar jugadores a Sudamérica, es porque acá hay habilidosos que allá no tienen… ¿O vos te pensás que a Echeverry y a Mastantuono lo vienen a buscar de Europa porque juegan a dos toques?

-Seguro que no, que no es por eso, que lo buscan porque tienen todavía esa cuota de potrero, de picardía, de habilidad…

-¡Claro…! Los formadores tienen que darles libertad a los chicos, buscar los habilidosos y después, cuando sean grandes, que tomen para el lado que quieran y que jueguen de la manera que quieran o le pidan, pero cuando son chicos, fomentar la habilidad, la picardía, la pureza esa del potrero.

Actualidad Tatengue -¿Unión necesita clasificar para la Sudamericana para que se produzca ese tan reclamado salto de calidad?

-¡Necesita clasificar a una Libertadores…! Unión ya jugó la Sudamericana, por eso digo que el verdadero salto de calidad es meterse en la Libertadores… Mirá, si entrás en la Libertadores, arrancás con un premio de 3.600.000 dólares, que es más que vender un jugador… La Sudamericana está dentro de las posibilidades, sé que no es fácil ni sencillo, pero el salto de calidad es apuntar a un título de campeón o a la Libertadores… Creer en grande, como es el slogan que tenemos acá en la Conmebol.

-¿Y puede ser?, ¿creés que Unión lo puede conseguir?

-¡Claro que puede ser…! Lo leo y escucho al Kily y siempre lo dice… Vos fijate una cosa: si entrás en la Libertadores tenés 3.600.000 dólares de arranque y 300.000 dólares más por partido… Patronato ganó dos partidos de Libertadores y se juntó 4.200.000 dólares… Es un progreso grande para los clubes. Libertadores y Sudamericana reparte mucho dinero hoy.

-Es la gloria por un lado y también un ingreso económico que capaz que no lo conseguís con la venta de jugadores, ¿es así?

-Mirá, la Libertadores es el torneo en el mundo que más premio paga. Este año, el que salga campeón del partido del 30 en River se llevará casi 50 millones de dólares…

-¿¡50 palos verdes…!?

-Entre el título de campeón de la Libertadores, la clasificación para la Libertadores del año que viene, la clasificación para la Recopa y el Mundial de clubes, suma más o menos esa cifra… Es muchísma plata para los clubes.

-¿Hay que cambiar la mentalidad para eso?

-Siempre lo dije… Hoy, el jugador de fútbol es 70 por ciento cabeza, mentalidad… Y los que están en la dirección, en la conducción, también deberían pensar en grande… ¿Para qué se juega?, ¿para qué se compite?… Se juega y se compite para ganar, para pelear, para intentar llegar a lo más alto siempre… Si no, no tiene sentido jugar para mantenerse. Esa es la equivocación más grande que se comete en el fútbol… Lo mismo pasa con los jugadores, cuando se acomodan… ¡Nunca hay que sentirse cómodos, siempre hay que jugar para progresar! Y eso es lo que le digo a los jugadores. Cuando estás en un club chico, querés ir a un grande; si estás en un grande, a la selección; si estás en la selección, a Europa y si estás en un chico de Europa, querés ir a un grande… Eso es el fútbol, un deseo permanente de progreso… Incluyo a todos en esto, no solamente a los jugadores… También va para los dirigentes.

-¿Cuesta mucho organizar este tipo de finales como las de la Sudamericana o Libertadores?

-La final de la Sudamericana, acá en Asunción, va a ser difícil porque sabemos que hay gente de Racing que va a quedar afuera… Está todo vendido y va a quedar gente afuera. Nosotros estamos muy acostumbrados a este tipo de finales. En la final de la Libertadores, en River, pensamos que habrá más de 70.000 personas y esto es llamativo porque van a jugar dos equipos de otro país… Respecto del partido de Racing, hay gente de Racing que compró entradas en el lugar asignado a Cruzeiro. Eso se detectó y se reorganizó todo, de manera tal que pensamos que no habrá inconvenientes.

Con información de: El Litoral