Revista MadridistaReal
·26 October 2025
Real Madrid 2-1 FC Barcelona: Jaque mate

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Los blancos, liderados por Mbappé y Bellingham, sellan los tres puntos en el primer Clásico de la temporada
El Real Madrid cumplió el plan establecido. Tras las estocadas en los Clásicos del curso pasado, la nave blanca sabía que no podía dejarse en la cuneta los tres puntos frente al FC Barcelona. Kylian Mbappé y Bellingham fueron los goleadores de un bloque madridista que firmó un partido completo y rutilante en todas las líneas para asentarse en el liderato doméstico.
Xabi Alonso fue muy taxativo en el once. Colocó en liza lo vaticinado. Huijsen, lesionado en el parón de selecciones, regresó a la de máquinas. Si bien es cierto que acababa de escapar del sanatorio, ningún futbolista quiere perderse partidos de esta estirpe. Pueden ser un gran trampolín en caso de dar el callo. Los fuegos artificiales, en la alineación, se detectaron arriba. En el ataque. Mbappé y Vinicius, los timoneles en el último cuarto de campo.
La música de viento, en lo que a la polémica arbitral se refiere, llegó pronto. Soto Grado señaló el punto de penalti tras una caída de Vinicius Júnior en el área con Lamine Yamal como actor principal. Sin embargo, el colegiado adscrito al colegio riojano, después de ver la imagen repetida, declinó la pena máxima. El ’10’ del Barça, a renglón seguido, intimidó a Courtois mediante un chut con rosca. Salió algo desviado. De esa forma logró despojarse de los nervios iniciales.
El partido no perdió burbuja y, minutos más tarde, Mbappé vio puerta a través de un obús primoroso. Pero, en el momento de conectar con la pelota, estaba en fuera de fuego. Acción de escuadra y cartabón. En cualquier caso, el crack de Bondy siguió siendo un martillo pilón. Percutió e insistió hasta la saciedad. Así las cosas, consiguió el premio en el ecuador del primer acto. Bellingham le envió un balón catedralicio a la espalda de la retaguardia azulgrana, tanto es así que Kylian definió como mandan los cánones. Batió con pulso de cirujano al cancerbero polaco.
Recolectado el gol, el Madrid quiso manosear en la herida. De todos modos, Szczęsny se encargó de impedir un nuevo tanto por tierra, mar y aire. Destacó sobremanera una intervención centelleante a Huijsen, que remachó a bocajarro en unas de sus proyecciones en el último cuarto de campo. Los blancos perdonaron, cosa que eludió por activa y por pasiva el cuadro rival.
La simbiosis entre Rashford y Fermín López se tradujo en el empate. Una diana del internacional con España que tuvo su génesis en una pérdida lapidaria de Güler en la zona de iniciación. A las puertas del descanso, en una fase cargada de intercambios de golpes, Jude Bellingham encontró la aguja en el pajar. Aprovechó una pelota en el segundo palo para convertir y dar forma al 2-1. Ya en el descuento en la antesala del descanso, el árbitro volvió a anular un gol a Mbappé por rematar en posición antirreglamentaria. Así daba fin un periodo con emoción a borbotones.

Angel Martinez/Getty Images
El pasaje por vestuarios no trajo consigo ningún tipo de aletargamiento en el comienzo de los segundos 45 minutos. Fermín, una mosca detrás de la oreja para la zaga madridista, probó fortuna con dos disparos peligrosos que neutralizó Thibaut. A continuación, el área culé volvió a aunar todas las miradas. Y es que, Eric García, en un intento de despeje, vio como el esférico impactaba en un mano. El trencilla lo consultó con el VAR, sopesó la jugada y decretó el penalti.
Mbappé asumió la responsabilidad. Ya no queda ni rastro del Kylian tímido y taciturno de antaño. En cambio, esta vez, el portero del FC Barcelona le adivinó el envío. Facturó una estirada felina. El Clásico perdió algo de fuelle, toda vez que las fuerzas empezaban a languidecer. Vinicius, antes de marcharse sustituido para dar entrada a Rodrygo, gozó de alguna llegada dañina.
El brasileño no entendió la decisión de Xabi y, mientras abandonaba el pasto, hizo varios gestos de disconformidad. Ceño fruncido, cabreo monumental y enésimo capítulo de tensión entre Vini y el técnico capitalino. Entre medias, Jude se quedó con las ganas del doblete al anularse una diana suya por fuera de juego de Brahim. No protestó el personal. El resultado apurado en el marcador avivó el temor a la igualada en Chamartín, pero la escuadra merengue supo aguantar. Además, jugadores como Mbappé, Rodrygo y Brahim pudieron meter más tierra de por medio. No se escapó la victoria en el descuento, que duró algo más de nueve minutos.
XI del Real Madrid: Courtois; Valverde (Carvajal, 74′), Militao, Huijsen, Carreras; Tchouaméni, Camavinga, Bellingham (Ceballos, 89′), Güler (Brahim, 65′); Vinicius (Rodrygo, 74′) y Mbappé (Gonzalo, 89′).
XI de FC Barcelona: Szczęsny; Koundé, Eric García (Araujo, 63′), Cubarsí (Roony, 82′), Balde (Gerard Martín, 90’+6′); De Jong, Pedri, Fermín; Lamine Yamal, Rashford y Ferrán Torres (Casadó, 63′).
Tarjetas (árbitro, Soto Grado): Valverde (amarilla, 22′), Pedri (amarilla, 41′; doble amarilla, 90’+9′), Huijsen (amarilla, 56′) y Fermín (amarilla, 90’+9′).
Goles: Mbappé (21′). Fermín (38′). Bellingham (43′).









































