Sergi Darder: «No voy a mentir, yo me quería ir y yo forcé mi salida» | OneFootball

El próximo sábado no será un partido sencillo para Sergi Darder, el futbolista del Mallorca es consciente de que no tendrá un buen recibimiento en el RCDE Stadium y durante la entrevista concedido a Relevo deja entrever que el club incumplió la palabra que le dieron cuando renovó su contrato.

“Trabajadores que van cambiando… Al final tienes tratos, porque conoces muy bien cómo funciona un club cuando llevas tantos años, y hace que llegues a medio acuerdos verbales. A mí me queda un año de contrato y yo no iba a renovar en ese momento porque no veía un proyecto de futuro en el Espanyol. Decía ‘vamos a ver cómo pasa la temporada’, que fue la del descenso, y ya veremos. Al final, seguramente por no ser egoísta y mirar por el bien del club, renuevo. ¿Qué haces? Te llevas la hostia después. Yo dije que cuando me quiera ir, si pasa, si mi cabeza no me permite seguir aquí, estemos en Primera o Segunda o donde sea, ¿qué va a pasar? ‘No te preocupes, te abriremos la puerta’. Después, cuando tú dices, ‘mira, no estoy bien, me quiero ir’, es cuando directamente te cierran la puerta. Creo que fui demasiado poco egoísta y seguramente miré demasiado por el club, renovando cuando no tocaba”, así explica Sergi Darder la situación que vivió en el Espanyol, pero al final acaba reconociendo abiertamente que “no voy a mentir, yo me quería ir y yo forcé mi salida, no forzar de poner una pistola o no entrenar ni mucho menos, simplemente ir al entrenador y decirle no quiero estar aquí”.

“Esto no se hizo público pero yo renuncié a la capitanía. Se lo dije a Luis García, si me tengo que quedar yo no voy a ser capitán. Yo no soy nadie ahora mismo, no estoy preparado como para ser el ejemplo de nadie en el vestuario porque yo soy el primero que me quiero ir y renuncié”, asegura Sergi Darder, pese a todo reconoce que “le voy a estar toda la vida agradecido al Espanyol, siempre seré del Espanyol, porque para mí es un club que me ha dado muchísimo. Seguiré siendo un perico como soy mallorquinista, que nunca dejé de serlo desde que me fui. Son dos equipos que voy a tener siempre en mi corazón y todo lo bueno que le pase yo me alegro por ellos”.

Sobre el partido del sábado, tiene asumido que le espera un ambiente hostil, pero lo tiene asumido. “Será un día para mí muy especial, con muchas ganas de que llegue, de ver amigos, ya no hablo de jugadores, sino de todos los trabajadores que estén ahí, que coges esa amistad con tantos años. Para mí es muy especial volver y ojalá poder jugar ese día, tengo esa ilusión, pero será un día a nivel emocional complicado. Sé que mucha gente va a pitar”.