Thiago Alcántara tiene una primera misión en el Barça: arreglar lo que nadie ha podido | OneFootball

Thiago Alcántara regresó oficialmente al FC Barcelona, pero esta vez no como jugador, sino como parte del cuerpo técnico. El exfutbolista español, que defendió la camiseta azulgrana entre 2009 y 2013 y se formó en La Masía, comenzó este jueves a trabajar junto a Hansi Flick como asistente táctico.

Se encargará de preparar los entrenamientos y aportar su visión del juego, adquirida en equipos como Bayern y Liverpool. Thiago conoce bien a Flick; coincidieron en Alemania en la temporada 2019-2020, cuando ganaron Bundesliga, Copa alemana y la Liga de Campeones en la fase final de Lisboa. Por entonces, Thiago fue pieza clave del Bayern y dejó una huella positiva en el técnico alemán.

El Barcelona oficializó la incorporación con un comunicado: "Primer día oficial de Thiago Alcántara como miembro del staff técnico. Colaborará en aspectos tácticos y en la preparación de las sesiones de entrenamiento, aportando experiencia y visión del juego".

Thiago Alcántara se une al staff de Hansi Flick | @FCBarcelona

El foco: calmar tensiones internas

Pero su llegada no solo tiene fines tácticos. Thiago también tendrá una misión menos visible, pero igual de importante: mediar en los conflictos internos. El primer reto es el pique que ha surgido entre Fermín y Gavi.

El problema empezó durante un entrenamiento en Corea. Gavi, como siempre, se dejó la piel en cada jugada. Sin embargo, una entrada especialmente dura sobre Fermín sorprendió a todos, no hubo pelea, pero sí tensión.

Al volver a Barcelona, la situación no mejoró. Gavi empujó a Fermín en otra ocasión y este pidió explicaciones. La atmósfera del vestuario se volvió incómoda, algunos compañeros comenzaron a notar que el conflicto podía escalar.

Intervención de los compañeros

Araujo y Raphinha decidieron intervenir. Hablaron con ambos y les pidieron resolverlo de manera sencilla: un abrazo, fue un gesto simbólico, pero necesario. La tensión disminuyó, aunque no desapareció por completo.

Aquí es donde entra Thiago, su experiencia y madurez pueden ser determinantes. Como exjugador del Barça, conoce la presión que viven los jóvenes y entiende la importancia de mantener la armonía. Su papel será guiar a Gavi y Fermín para que canalicen la intensidad dentro del campo sin que afecte al grupo.

Un primer paso hacia la estabilidad

El Barça encara una temporada con muchos cambios y desafíos. Tener a Thiago en el staff técnico no solo aporta conocimientos tácticos, sino también un referente emocional. Sabe cómo lidiar con la presión y cómo mediar entre compañeros.

Si consigue calmar las pequeñas fricciones, su impacto será más profundo de lo que parece. No se trata solo de fútbol; se trata de mantener un vestuario unido. Y en un equipo con tanta calidad y juventud, eso puede marcar la diferencia entre una temporada complicada y una exitosa.

La misión de Thiago comienza con un gesto simple: arreglar lo que nadie ha podido. Una entrada fuerte, un empujón y mucha intensidad en el césped. Todo eso ahora necesita un guía que transforme la tensión en cooperación y Thiago está listo para asumir ese reto.