Tolima y América jugaron para el Medellín | OneFootball

¡Parce, qué partidito se mandaron en Ibagué! Tolima y América se fueron con todo, pero al final la cosa terminó en empate 1-1 en el Manuel Murillo Toro. Fue un duelo intenso, de esos que uno ve con el corazón en la mano aunque no esté el poderoso en cancha. Pero ¿sabés qué? Ese empate nos sirve y mucho. ¡Nos deja la puerta abierta pa’ soñar en grande!

Parce, no nos digamos mentiras: el empate les bajó los humos a esos dos. El Tolima quería ponerle el pie encima a la tabla, pero América también estaba con sed de gloria. Se dieron con todo, pero no pasaron del uno a uno. Y eso, mi llave, es justo lo que necesitábamos pa’ que el DIM se monte a lo más alto… siempre y cuando hagamos la tarea, claro.

Ahora todo depende de nosotros, del Poderoso. Si nos vamos con toda a Barranquilla y le metemos el alma y el fútbol al Junior, ¡parce, nos montamos al liderato del grupo! O sea, no es carreta ni humo: estamos a 90 minutos de sacarle provecho a ese empate y demostrar por qué este equipo tiene corazón y garra de campeón.

La hinchada lo sabe, la vibra está ahí. Barranquilla no es fácil, lo sabemos todos. Pero este DIM tiene con qué, parceros. Si nos conectamos como lo hemos hecho en otras batallas grandes, si salimos con ese fuego en el pecho que solo da la camiseta roja, podemos dar el golpe sobre la mesa. ¡Que tiemble la tabla, que llegó el medallo!

Y es que este resultado, aunque a muchos les sepa a poco, a nosotros nos cae como un guante. Nos da la chance de depender de lo nuestro, de dejar de hacer cuentas con lo que hagan los demás. ¡Es momento de apretar los dientes y soñar en voz alta, como lo hacemos siempre los que llevamos al DIM en el alma!

Así que parcero, usted que está leyendo esto, póngase la camiseta con orgullo, alce la voz, y crea. Porque este grupo está vivo, el camino está abierto y la historia está lista pa’ que el poderoso la escriba con goles, con huevos y con toda la pasión que llevamos en la sangre.

Nos vemos en el Metropolitano, desde la pantalla o desde la tribuna visitante. ¡Porque cuando juega el DIM, no hay distancia que nos separe! ¡Vamos por esos tres puntos, por el liderato y por seguir creyendo que este semestre puede ser rojo, bien rojo como nuestra pasión!