Arsenal – PSG: Dembélé pica primero | OneFootball

El extremo francés anotó el único tanto del partido para darle la victoria a los suyos y conseguir una mínima ventaja para la vuelta. Los visitantes dominaron la primera mitad y pudieron sentenciar, pero los postes lo impidieron.

El Arsenal lleva demasiado tiempo sin levantar un título de peso y, tras ver como el Liverpool tomaba el testigo del todopoderoso Manchester City, se aferra a la orejona. Bien vale la pena dejar escapar una Premier, si a cambio eliminas al vigente campeón de Europa y presentas tu candidatura para ocupar su lugar.

Unas credenciales que tomaron forma con un 3-0 en el Emirates ante un Real Madrid impotente y silenciando al Santiago Bernabéu. Pero en las semifinales se cruzaba el PSG del desatado Dembélé y el mosquito picó a los cuatro minutos. Kvarastkhelia encaraba por la izquierda, la puso atrás y el galo golpeó de primeras a un palo largo que ayudó para que el esférico se colara.

Primera parte: Un PSG de vértigo

Los locales no eran capaces de salir de su propio campo debido a la presión alta y clásica de Luis Enrique. David Raya tenía que intervenir dos veces y la posesión era monopolizada por los parisinos. Además, el extremo georgiano provocaba el caos a un Timber desbordado, hasta con las ayudas de Saliba.

Los gunners se encomendaban a Saka y los franceses daban un paso atrás para salir al contraataque. Así llegaría otra para el cuchillo ex napolitano y Doue se sumaba al vendaval; trallazo que se topó con una mano durísima del arquero español. El Arsenal estaba en la lona y pedía a gritos el descanso a la media hora.

El público pagaba su frustración abucheando al colegiado y a Arteta se lo llevaban los demonios. Pero Bukayo hacía diabluras para intimidar a los visitantes. Un arreón que llegó a cinco minutos del camino a vestuarios, pero que espoleaba a los británicos hacia el túnel. Una batalla abierta y caliente, de demasiadas amarillas que se iba a la pausa 0-1. Gracias a la intervención de Donnaruma a Martinelli en posible fuera de juego.

Segunda parte: El Arsenal se choca

La conjura londinense pudo consolidarse justo en la reanudación y desde la pizarra. Declan Rice centraba una falta lateral para que Mikel Merino cabeceara a la red, pero el VAR anuló la jugada. El rectángulo se inclinaba hacia la portería de ‘Gigi‘ y la grada arengaba lamentándose de la ocasión detenida a Trossard con una manopla salvadora.

El PSG supo sobrevivir a esos quince minutos frenéticos, mostrándose compacto y concediendo poco espacio entre líneas. Un buen balance defensivo acompañado de repliegues solidarios que obligaban a los locales a abusar de centros y desplazamientos en largo. Un desgaste físico que se llevó por delante a Dembélé, que se retiró lesionado para que entrara Barcola.

‘Lucho’ también llamó más tarde a Gonçalo Ramos en lugar de Doue para resistir los embistes de un Arsenal que no se rendía. Los locales acorralaban a los galos en su propia área, pero estos parecían cómodos mientras el reloj jugaba a su favor y su adversario era incapaz de avanzar. Para colmo, Arteta no movió ficha hasta el minuto 82 en el que Ben White remplazaría a Timber, Barcola rozaba la madera y el ariete portugués reventaba el larguero.

En los últimos instantes, Luis Enrique retiró a un exhausto João Neves por Zaïre-Emery para rascar segundos, a la vez que Ødegaard daba paso a Nwanery. Cada vez con menos tiempo y menos ideas, los locales se ahogaban y finalizaban las jugadas precipitadamente y sin acierto. Con más corazón que cabeza, la ida de la semifinal murió en un saque de esquina en el que Donnaruma fue derribado inocentemente.