VIP Deportivo
·24 de junio de 2022
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Kosovare Asllani dejará de ser jugadora del equipo blanco de forma oficial el próximo 30 de junio. La delantera ha declarado que el club se ha vuelto un lugar «insano» para cualquier jugadora.
El Real Madrid Femenino debería de empezar a plantearse cuál es su objetivo. A pesar de que con la llegada de Alberto Toril los resultados fuesen mejorando, lo cierto es que el equipo todavía no llega a pelear contra el Barça en la Liga Iberdrola, y en UWCL parecen seguir el mismo camino.
La afición está cansada. Dos años de «prueba» parecen más que suficientes para que un equipo de la talla del Real Madrid asuma el nivel de las competiciones. Todo señala a la directiva, de la que Ana Rosell se hace cargo, junto con Begoña Sanz.
Las recientes salidas de grandes jugadoras, como Cardona o Asllani, ponían en el punto de mira a Rosell, ya que la mayoría de futbolistas que no han sido renovadas, habían firmado la carta para destituir a David Aznar.
Si algo faltaba para que los seguidores del conjunto merengue señalasen todavía más a la directiva eran unas declaraciones de alguna jugadora. Kosovare Asllani, ya leyenda del equipo que dejará el club en a penas una semana, ha hablado en la concentración con su selección, y no ha tenido ningún tipo de pudor a la hora de narrar las situaciones vividas.
Sin miedo a las consecuencias, la sueca comenzaba recalcando la importancia de la situación. «Para mí es importante hablar, ya que nadie más lo ha hecho. He intentado que las cosas cambiaran, pero el ambiente que se creó ahí es malo», sentenciaba.
Sin duda, la parte más fuerte de las declaraciones de la ex ‘9’ blanca ha sido la relativa a las lesiones. «No fue coincidencia que me lesionara allí y tuviera un contratiempo».
“Se presiona constantemente para que juegue lesionada o enferma. No es un entorno saludable. Me importa mucho el club, pero creo que está en las manos equivocadas, simple y llanamente. Mucha gente opta por atropellar al equipo médico porque nos ven a las jugadoras como productos y no como personas”, destacaba.
Asimismo, Kosse también daba la cara por sus ex compañeras, señalando que muchas jugadoras han tenido que vivir diferentes situaciones que no están bien y que no son propias de un club de primera.
Unas declaraciones durísimas a las que la afición vikinga no tardó en reaccionar. La inmensa mayoría de los aficionados creen en las palabras de su gran estrella, palabras que claramente apuntan a la dirección deportiva.
Un club de la talla del Real Madrid no puede ni debe permitir que se den estas situaciones en cualquiera de sus equipos.Quizás sea un buen momento para que la entidad comience a reflexionar, y sobre todo, para que el presidente, Florentino Pérez, tome las medidas oportunas.
Mientras tanto, Rosell y Sanz se mantienen calladas, y como bien dice el refranero español, «quien calla, otorga».
Imagen principal vía: Real Madrid
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