Blue Jays 1 (1-1) 5 Dodgers: Will Smith pega el golpe | OneFootball

Los Dodgers se han llevado la victoria en el segundo partido de la Serie Mundial, que por un momento pareció que se iba a convertir en un duelo entre Gausman y Yamamoto. Al final apareció Will Smith, que con un cuadrangular y dos impulsadas le ganó medio partido a sus Dodgers. El próximo partido será la noche del lunes al martes.

La MLB apostaba por dos divas para los prolegómenos del segundo partido. Bebe Rexha interpretaba «The Star Spangled Banner» mientras que Alessia Cara hacía una rendición del «Oh Canada» ataviada con una camiseta de los locales. Cabe remarcar que más de 200 soldados del ejército canadiense habían desplegado una bandera gigante en el césped. Se rendía homenaje en el «first pitch» a Joe Carter, un hombre fundamental en las Series Mundiales de 1992 y 1993.

Inicio para las defensas

A los Blue Jays se les complicaba el inicio de la serie debido a un mal inicio de su pitcher. El lanzador concedía dos hits, el primero a Freeman para que este se fuera a segunda y el siguiente a Will Smith para impulsar la carrera de FF. Cuando les tocó atacar, Springer y Lukes consiguieron batear pero Yamamoto ponchó a Varsho, lo cual ponía a los Dodgers en posición de aumentar la ventaja. Lo más destacado de la segunda era un error de Freddie Freeman muy curioso, fallando al atrapar una pelota cayendo del cielo golpeada por Climent. Por lo demás, muy poco.

La Top 3rd de los Dodgers era floja, también gracias al gran trabajo de Gausman desde la loma. Toronto Blue Jays se veían en una situación muy favorable teniendo en cuenta que comenzaban su lista de bateo. Un hit profundo de Guerrero preparaba la situación que luego Springer aprovecharía corriendo desde 3ª en un «pisa y corre». Es decir, en un lanzamiento buscando eliminación desde el jardín al home plate. El 1-1 se mantendría en la cuarta, una entrada en la que enseguida ambos llegarían a los tres eliminados.

Will Smith desnivela el duelo de pitchers

Lo mismo que ocurría en la cuarta, ocurría en la quinta. Al final de la misma veíamos un momento de piel de gallina. Con el lema «I stand up for» (yo me levanto por), todo el estadio incluidos jugadores y banquillo se levantaban con el nombre de una persona con cáncer apuntado en una pizarra. Era una reivindicación preciosa. Se unían los Jonas Brothers interpretando la canción «I Can’t Lose» en una actuación no emitida en España.

Para la sexta, tanto John Schneider como Dave Roberts optaban por conservar a su abridor. Lo sorprendente es que ambos eran como Benjamin Button porque se les veía mejor que nunca y el partido ya parecía abocado a no desequilibrarse. Sin embargo, aunque los lanzadores se hubieran convertido en protagonistas, Will Smith rompía la sequía anotadora con un espectacular home run al segundo anillo del jardín derecho.

Instantes después, Max Muncy enviaba a la cordada a conocer el bullpen y también a Gausman (majestuoso en el día de hoy) de vuelta al mismo tras 17 strikeouts. En definitiva, conseguía un 1-3 que era aire puro para los Dodgers. John Schneider decidía, como remedio de última hora, meter como pinch hitter y luego como segunda base a Bo Bichette, que venía con molestias en la rodilla izquierda.

Los Blue Jays se cayeron cual castillo de naipes una vez los Dodgers empezaron a despegar todo su potencial ofensivo. Primero sacaron a Varland, que llenó las bases, y luego llegó Hoffman que le entregó una carrera a Dodgers en su primer lanzamiento. Lo hizo lanzando la pelota obviamente por error al pie de Freeman. Viendo la situación, salía para cerrar Fisher, con el partido quedándose 5-1 dado que la defensa Dodger no les daría margen. Yamamoto volvía a hacer un partido completo (hoy 105 lanzamientos) tras lograrlo ante Milwaukee la semana pasada y es la primera vez que ocurre en Serie Mundial desde que lo hiciera Johnny Cueto con los Royals hace diez años.