Un 10 Puro
·20 de marzo de 2021
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·20 de marzo de 2021
Southampton fue al Vitality Stadium como favorito y no defraudó. Se impuso con mucha facilidad ante el equipo de Championship y con el aporte ofensivo de Nathan Redmond, se clasificó a las semifinales de la FA Cup. La diferencia entre un equipo y otro se vio plasmado en el desarrollo del juego y también el marcador. Ahora los Saints esperan por su próximo rival en este certamen.
El Southampton quiso dominar desde el principio del juego y lo logró pese a la presión alta realizada por el conjunto de Championship. Los Cherries no quisieron defender tan atrás y apostaron por cortar las jugadas en terreno contrario para estar más cerca del arco de los Saints. Pero aún así, la visita encontró facilidades para hacer daño y a los 10 minutos ya convertía un gol. Un balón cruzado encontró a Kyle Walker-Peters quien apareció sólo desde la banda derecha y ejecutó un gran centro que terminó metiendo en propio arco Carter-Vickers. Por fortuna para el defensor, el VAR intervino y anuló todo por un offside milimétrico del futbolista que envió el centro cruzado.
Los dirigidos por Ralph Hasenhuttl no se rindieron y siguieron atacando. Un desborde de Armstrong a los 15 minutos finalizó en un centro atrás que Bertrand desaprovechó tras un disparo desviado. Posteriormente, el ritmo del juego comenzó a bajar y en ese entonces Bournemouth comenzó a crecer. Tuvo un par de situaciones pero Fraser Forster contuvo los remates de Groeneveld y de Riquelme.
Y en el peor momento del Southampton llegó el primer gol. Redmond recibió en el centro de la cancha y comandó un contraataque tan veloz como efectivo. Con muchos espacios el futbolista asistió a Djenepo quien definió cruzado, abajo y así abría el marcador a los 37 minutos. Pero habría más emociones y en tiempo de adición llegó el segundo tanto proveniente de un lateral. Nuevamente Redmond fue el protagonista quien tuvo mucho espacio para correr en diagonal hacia el arco y luego definir alto, cruzado y lejos del alcance de Begovic. Así, los equipos se iban al vestuario con el 2 a 0 en el marcador.
Los Cherries buscaron descontar rápidamente y a los 3 minutos tuvieron una buena posibilidad. Jack Wilshere remató desde afuera del área pero el balón pegó en la parte externa del arco. A los 7 minutos, llegó un duro golpe para los locales porque Che Adams definió contra el palo lo que sería el 3 a 0. Sin embargo, nuevamente el VAR hizo su aparición y anulo el gol por una posición adelantada del delantero. De esta forma, el Bournemouth se mantenía con esperanzas en el juego.
A los 14 minutos llegó el tercer tanto que finalmente terminó con las esperanzas del conjunto dueño de casa. Ward-Prowse recuperó la pelota cerca del área, se la pasó a Redmond quien asistió a Armstrong que venía desde atrás. El disparo de este último pegó en el poste y en el rebote, Redmond definió con suma facilidad con Begovic en el piso y haciendo un esfuerzo por volver a reponerse del tiro anterior. Era el segundo tanto del número 11 de los Saints.
Los cambios realizados por Jonathan Woodgate no pudieron despertar al Bournemouth. Los ingresos de Surridge, Anthony y Mepham por Riquelme, Pearson y Rico no tuvieron ningún efecto positivo. Físicamente, los Cherries parecían exhaustos y no tuvieron la misma energía y el mismo espíritu de lucha que en la primera mitad. Por su parte, los visitantes siguieron atacando y un remate fuerte de Armstrong puso a prueba a Begovic a los 27 minutos. El arquero respondió bien y despejó el peligro cuando podría haber sido el cuarto gol.
En los últimos minutos, Ralph Hasenhuttl aprovechó para darle minutos a otros jóvenes que habitualmente no tienen oportunidades ya que el ritmo bajó notablemente y ninguno de los dos generaba demasiado peligro. Terminó siendo un triunfo tranquilo para el Southampton que sueña con quedarse con esta copa.