Bueno, bonito y barato, Hansi Flick ha pedido su fichaje, Joan Laporta acepta y paga | OneFootball

El FC Barcelona encara el mercado invernal con una preocupación clara: la defensa. La salida de Iñigo Martínez y las dudas que todavía persisten sobre Andreas Christensen han dejado al equipo con pocas alternativas fiables en una zona clave del campo.

Hansi Flick ha transmitido a Deco y Joan Laporta que necesita refuerzos cuanto antes y tiene un nombre marcado en rojo: Murillo Santiago Costa dos Santos, central brasileño del Nottingham Forest. Para el técnico alemán, se trata de un perfil que encaja perfectamente con su idea de juego y que puede formar una dupla sólida junto a Pau Cubarsí.

El compañero ideal para Pau Cubarsí | Getty Images, Madrid-Barcelona

Murillo, la apuesta joven

Murillo, de 23 años, se ha consolidado como uno de los defensas más prometedores de la Premier League. Se destaca por su capacidad para anticipar las jugadas y su valentía en el uno contra uno. Además, tiene facilidad para salir jugando desde atrás, lo que lo convierte en un central ideal para el estilo del Barça.

Flick considera que la combinación de juventud, talento y proyección de Murillo puede aportar estabilidad inmediata a la zaga. Además, cree que aseguraría el futuro del club en esa posición durante los próximos años. Además, el jugador ha mostrado interés en dar un salto en su carrera y en disputar competiciones de alto nivel, lo que facilita las negociaciones.

El desafío económico

El principal obstáculo para cerrar la operación es el precio. Nottingham Forest pagó en 2023 alrededor de 12 millones de euros por Murillo al Corinthians, y en solo dos temporadas su valor se ha disparado hasta aproximadamente 55 millones según Transfermarkt.

El interés de otros clubes, como el Arsenal, podría encarecer aún más la operación, lo que obliga al Barcelona a ser creativo. Con un Fair Play financiero ajustado y un presupuesto limitado, Deco debe buscar la manera de que el fichaje sea viable. Todo esto sin poner en riesgo la estabilidad económica del club, la negociación, por tanto, será clave para convertir este deseo en realidad.

Una inversión estratégica

El Barça no busca únicamente un refuerzo temporal, sino un jugador que pueda liderar la defensa a largo plazo. Murillo es zurdo, fuerte físicamente y con carácter para asumir responsabilidades. Su juventud garantiza recorrido y capacidad de crecimiento, convirtiéndolo en una apuesta estratégica que podría consolidarse durante muchos años.

Flick ha dejado claro que no hay tiempo que perder: el equipo necesita soluciones inmediatas, y Murillo es la opción preferida. Ahora la responsabilidad recae sobre Deco, que deberá cerrar un acuerdo que combine necesidad deportiva y prudencia financiera para que el central brasileño llegue a Barcelona en enero.