Grada3
·11 de noviembre de 2025
Camavinga necesita a un Kroos a su lado: sigue sin encontrarse en el centro del campo

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·11 de noviembre de 2025

En el fútbol, como en la vida, hay momentos, oportunidades, en donde las personas deben aprovechar lo que se les presenta. En momentos complicados, cuando las cosas parecen no funcionar bien, las grandes promesas, las esperanzas de futuro, tienen la opción de abrirse camino, se convertirse en una solución, en una alternativa sólida. Camavinga está en un momento de su carrera en el que le toca asumir ese rol, ante el Rayo Vallecano tuvo esa oportunidad, ese momento para dar un golpe sobre la mesa, pero decepcionó, una vez más.
Tras cuatro temporadas en el club, llegando siendo muy joven, Camavinga afronta este quinto curso con el objetivo (y la necesidad), de dar un paso al frente, de pasar de ser un buen jugador, una joven promesa, a convertirse en un centrocampista determinante y capacitado para llevar el peso de un grande. En sus tres primeros años, fue evolucionando, aportando cosas importantes a un equipo en la cresta de una ola que seguía sumando Champions a sus vitrinas. Pero cuando la ola se diluyó, en la pasada temporada, muchos jugadores se vieron arrastrados. Es el caso del francés, que no rindió, condicionado por las constantes lesiones y la falta de continuidad. Terminó el curso con una grave lesión que le apartó cuatro meses de los terrenos de juego, hasta finales de este mes de septiembre.
Su vuelta, con la confianza de Xabi Alonso, y con los objetivos de dar ese paso al frente que se le exige (también se lo exige él mismo), comenzó a acumular minutos que han dado pie a la esperanza. Sin embargo, a medida que ha acumulado partidos, y en momentos de la verdad, su rendimiento vuelve a estar en el punto de mira.
La baja de Tchouaméni suponía una gran oportunidad para un Camavinga que estrenaba responsabilidad este curso. Debía ser el pilar que sujetara al equipo, como su compatriota, y sumarse esa calidad con el balón que asesoran sus botas. Pero ni una cosa ni la otra: apenas tuvo incidencia en el juego, apenas, aportó ni en defensa ni en ataque. Hasta tal punto que Xabi Alonso acabó por desplazarle, de nuevo, a la banda derecha, poco antes de sustituirle, dejando al equipo sin mediocentro defensivo, con Güler y Ceballos encargados de sujetar al equipo.
Camavinga ha perdido una oportunidad, otro más, pero aún le quedan balas, pero se le acaban. Es un futbolista que tiene mucho mercado, en la Premier, y si no es capaz de dar el salto de calidad esperado, el club podría buscar alternativas. Porque ya no se trata solo de que faltan jugadores en el centro del campo, se trata también de que, los que tienes, puedan aportar, de forma regular, y no a cuentagotas.
El pasado curso el club ya se planteó su salida, pero la lesión en el tramo final de temporada, y la falta de efectivos y de alternativas, frenaron un posible traspaso que, además, no hubiera dejado el dinero que el jugador vale. Pero, si el Real Madrid, y el jugador, se mantienen en la línea actual, el equipo deberá acometer cambios importantes, y eso pasará por la venta del francés.
Camavinga sigue desaprovechando oportunidades, no parece estar capacitado para actuar si un escudero a su lado, con alguien que le facilite la tarea, porque cuando le toca dar el paso, falla. Jugar al lado de Toni Kroos, de Modric, era sencillo, pero ahora se ha quedado huérfano y no está capacitado para coger la alternativa.









































