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·12 de septiembre de 2024
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·12 de septiembre de 2024
Cerro Porteño sigue en picada. Decepcionó nuevamente en casa y empató 1-1 ante Trinidense, desperdiciando un par de puntos que le pueden seguir costando alejarse de la cima del Clausura.
El Ciclón mostró un rostro pálido, quiso maquillar en actitud en el segundo tiempo, pero no pudo sostener la continuidad del buen juego y terminó cediendo ante un guapo Sportivo Trindinese, que se llevó un puntazo de la Nueva Olla.
El primer tiempo en la Nueva Olla fue prácticamente para el bostezo. Trinidense bloqueó absolutamente todo y a Cerro no se le cayó una gota de imaginación, con un mediocampo muy lento y predecible.
Derlis Rodríguez muestra un nivel cada vez más bajo y Juan Iturbe estuvo demasiado enredado como de costumbre, ya que le cuesta una enormidad explotar sus virtudes cuando no tiene muchos espacios.
Francisco da Costa fue el más activo junto a Fernando Fernández, pero Cerro no pudo sacudirse de la apatía tremenda. Y Trinidense no supo aprovechar el letargo azulgrana, ya que tuvo espacios para explotar con la velocidad de Manuel Romero y Brian Andrada.
Con los ingresos de Gabriel Aguayo y Cecilio Domínguez, Cerro tuvo más desequilibrio y algo más de inventiva.
Generó más chances y los delanteros como Fernández y Francisco da Costa, recibieron más pelotas limpias en territorio rival.
Justamente, tras una buena llegada azulgrana con Aguayo y Fernández, que terminó sacando el portero Víctor Samudio, llegó un tiro de esquina bien ejecutado por Cecilio Domínguez, para que Da Costa clave un cabezazo perfecto al poste izquierdo del guardameta de Trinidense.
Después de la ventaja parcial, Cerro perdió el control del juego y Trinidense creció en fútbol. Las variantes ofensivas le dieron más peso al equipo visitante, que recurrió al juego aéreo para devolver gentilezas.
Un centro perfecto de Milton Maciel fue conectado en el segundo palo por David Villalba, quien sorprendió a todos con un gran cabezazo a la carrera para sellar el 1-1 definitivo.
El equipo de Manolo Jiménez perdió la brújula del partido y se fue totalmente del encuentro. Se olvidó de la inventiva y ya no generó jugadas para merecer algo más que la igualdad.