Santa Fe Deportivo
·25 de mayo de 2023
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Daniel, padre del delantero, dialogó con TyCSports.com y desde las tribunas del Madre de Ciudades, se emocionó al ver a su hijo con la Albiceleste y hasta reveló el secreto mejor guardado del futbolista.
«-Disculpá, ¿vos sos el papá de Maestro Puch?». La charla no comenzó, pero la primera anécdota se da mientras Daniel Maestro busca su butaca en el estadio Madre de Ciudades. Faltan minutos para que la Selección Argentina enfrente a Guatemala por el Mundial Sub 20 y los jugadores todavía no salieron al campo de juego. «Antes era el doctor Maestro, ahora soy el papá de Nacho», cuenta entre risas Daniel, padre del delantero de Atlético Tucumán Ignacio Maestro Puch, quien además integra la Selección Argentina juvenil. Esa anécdota, sin embargo, no será la primera -ni la mejor- del diálogo con el papá de Nacho.
Sabido es que Maestro Puch dio sus primeros pasos en el mundo del rugby. Su padre practicaba ese deporte y Nacho, desde muy chico, quería seguir sus pasos. «Él era muy garrapata conmigo, se pegaba a todos lados. Ya desde muy chico tenía cosas especiales, mágicas. Todo lo que hacía, lo hacía con muchas ganas y felicidad. Empezó jugando al fútbol y al rugby, estuvo con Boca, con Vélez y con 13 años vinieron de Independiente y lo probaron. Jugó un Mundialito en Villa Domínico y quedó», comienza a narrar Daniel, quien llegó a Santiago del Estero junto a toda su familia y hasta algunos amigos para ver los partidos de Argentina en el torneo.
Daniel Maestro, padre de Ignacio Maestro Puch.
Sin embargo, ese futuro que parecía se en el Rojo de Avellaneda, de golpe se nubló, según recuerda su padre: “Después de unas vacaciones en Brasil se me trancó y no quería volver, extrañaba a los amigos, el colegio… Yo me quería morir porque le decía que el tren pasaba una sola vez. Pero se volvió y otra vez jugó al rugby”.
Esa pasión por el rugby no desapareció, pero el bichito del fútbol volvió a picar cuando Nacho le pidió a su padre que lo lleve a probarse a Atlético Tucumán: “Lo dejé, me fui y quedó. Ahí hizo todas las Inferiores, jugó en la Reserva y después la historia que ustedes ya saben”.
Pero lo que no se sabía, al menos hasta ahora, fue que Maestro Puch jugó en simultáneo al rugby y fútbol, a escondidas de la gente de Atlético Tucumán durante sus primeros meses en el club. Casi como un chico, bajando la voz en un estadio en el que ya casi no se escuchaba nada y después de emocionarse al ver a su hijo salir al campo de juego, Daniel se permitió contarlo: “La gente de Atlético no lo sabía, pero él llegaba de los partidos de AFA, se iba a jugar al Lawn Tennis, hacía dos tries y volvía. Pero después llegó el momento de la decisión y ahí se volcó por el fútbol. Igualmente, siempre lo tuvo claro. Su sueño es llegar a Europa y jugar con la Selección, ahora con la Sub 20 y eventualmente con la Mayor”.
Le emoción sigue a flor de piel, la familia de Nacho lo ve entrar en calor. Daniel lo mira desde la platea baja del Madre de Ciudades. Allí, emocionado, reflexiona sobre lo que viven tanto su hijo desde el campo de juego como él desde la tribuna, viendo cómo miles de tucumanos que viajaron a Santiago del Estero lo piden y lo ovacionan: “Eso fue realmente lo que me dio una felicidad inmensa. Él se debe a la gente, al club, al público. Creo que tiene una especie de ángel porque ha pegado algo especial con la gente y se nota. Eso me llena de alegría y satisfacción. La humildad que tiene es lo que más me pone contento”.
Con la victoria ante Guatemala ya consumada, Ignacio Maestro Puch habló con TyC y dijo. «Mi viejo es un grande, la vive más que yo y está siempre alentándome. Sabe que no soy muy expresivo, pero lo quiero mucho y le agradezco las palabras que me da», sostuvo el delantero tucumano.
Al ser consultado sobre el secreto que reveló su padre, Nacho confirmó que era real: «Sí, hice un año de rugby y fútbol. A veces hasta entrenaba tres veces por día todos los días. Con Atlético viajaba, llegaba los domingos, me bajaba del colectivo y me iba a jugar al rugby. En un momento ya no lo podía hacer más y me decidí por el fútbol».