Informa Fútbol
·10 de noviembre de 2020
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·10 de noviembre de 2020
Vuelve el parón de selecciones. Con ello, los seguidores del fútbol suelen disgustarse con esta noticia. También los hay que adoran ver jugar a sus selecciones de vez en cuando. Quienes seguramente disfruten de estos partidos son los propios futbolistas convocados por la selección de su país. Sin embargo, Damian Kadzior rechaza acudir a la convocatoria de Polonia para quedarse en las instalaciones del SD Eibar con el objetivo de ganar la confianza de su entrenador, José Luis Mendilibar.
El historial de la trayectoria del extremo derecho marca la tendencia luchadora del futbolista por un deseo de crecimiento y de mejora constantes. De esta manera, durante buena parte de su carrera ha participado en la liga polaca. Tanto en la Primera División, como en la Segunda y Tercera polacas. Tuvo años en tercera y segunda que no llegó a ser titular indiscutible en sus respectivos equipos. En la temporada 2017/2018 daría el salto definitivo con el KS Górnik Zabrze, equipo donde fue una pieza clave anotando nueve goles y dando cinco asistencias en la Primera División polaca. Sus buenas actuaciones sirvieron para que un grande de Croacia como el Dinamo Zagreb adquiriera en propiedad al delantero. En tierras balcánicas, durante dos años aportó 16 goles y una asistencia, con participaciones incluidas en Europa y Champions League.
El único desembolso fuerte del Eibar en el mercado estival fue precisamente este futbolista de experiencia contrastada. Aunque su inicio en LaLiga Santander ha sido malo para él. Una única titularidad en cinco partidos ligueros. Motivo suficiente para que el guerrero futbolista decline la oferta de jugar con su país mientras así pueda acabar convenciendo a un viejo conocido de la liga española como lo es Mendilibar, conocido por la exigencia y la tremenda disciplina que exige a sus jugadores.
Damian Kadzior demuestra lealtad a su club y, todavía más importante, la gran motivación por lograr la titularidad para así ser una pieza importante del conjunto vasco. De forma habitual, actitudes como esta tienen premio.