De Kipsta a Dior | OneFootball

La pasada jornada, Antoine Griezmann sorprendió llevando las mismas botas que podría haber llevado tu sobrino. Unas Kipsta de 65 pavos, unas CLR SG diamante negro. Antes había llevado unas botas absolutamente negras y sin marca visible, muestra de sus rencillas con Puma a la hora de renovar, y ahora sorprende con la marca francesa. Marca que es la línea futbolística de la gran cadena de ropa económica de deportes Decathlon.

- Antoine Griezmann cambia Puma por las botas negras Kipsta (@Atleti) -

Caracterizada por sus precios asequibles y, por lo tanto, vender la ropa y los accesorios deportivos perfectos para que los principiantes rompan mano. Es estúpido comprarse unas botas excesivamente caras si es tu primer año en el fútbol. "Imagínate que no te gusta y lo dejas a mitad de temporada", dicen siempre las madres a sus hijos antes de comprarles las Kipsta que lleva Griezmann. Igual es que Griezmann también deja pronto el fútbol y no lo sabemos.

El caso, y alejados ya de la ironía, es que es una realidad ya palpable que Kipsta quiere entrar al pastel del fútbol. Igual que un día lo hizo la ya mencionada Puma o las archipotentes Adidas y Nike. La marca francesa ya ha firmado contrato con la UEFA para suministrar los balones de esta temporada en Conference Legue y Europa League. Esto supone un movimiento ambicioso que les proporcionará entrar por la puerta grande a los ojos del gran público. ¿Vendrá para quedarse y pelearse por parte del pastel? ¿O su andadura por el fútbol será otra simple anécdota para los más nostálgicos como lo fueron más casos fallidos?

Otras marcas que no consiguieron consolidarse

- Sergio Canales, con SLAM (@Racing Santander) -

SLAM

La marca de prendas náuticas aterrizó en el fútbol, sin saber si un balón era redondo o cuadrado, en 2009 de la mano del Racing de Santander y convencidos por Francisco Pernía, presidente del club cántabro en la época. Su relación nacía de la gran presencia de la marca italiana en Santander, dada la popularidad y la práctica común de los deportes de vela en la región. Solo firmaron contrato hasta 2014 y no volvieron a colaborar con ningún club. Aun así, nos dejó para la historia la imagen de Sergio Canales presentando su talento al mundo del balompié mientras vestía una de sus camisetas.

DIADORA

La marca italiana nació durante la posguerra, en 1948, para fabricar botas para los militares. Después se pasó al tenis, al esquí y más tarde al fútbol, de la mano de estrellas italianas como Francesco Totti y de equipos emblemáticos como la AS Roma o la Selección de Italia de los años 80. Aún así, en 2009 entró en quiebra, la compró Geox -los de las zapatillas que respiran- y perdieron inversión en su faceta futbolera.

Otras marcas como Rasán o Xara, que vistieron al Levante UD durante algunas temporadas en los últimos treinta años, hoy día no se les encuentra vistiendo a ningún equipo de fútbol profesional.

La irrupción de las marcas de lujo

No obstante, pese a las firmas que van y vienen, el pastel es cada vez más grande y está más bueno. Lo saben muchas marcas de lujo que se retractan de estrategias del pasado, donde solo veían en el fútbol a 22 sudados en gayumbos peleando por un balón, y ahora ven una jugosa oportunidad.

Emporio Armani ahora viste en el césped al Napoli, Dior tiene una camiseta exclusiva con el PSG y CP Company viste fuera de los terrenos de juego al Manchester City. ¿Por qué? Porque David Beckham abrió el camino vendiendo su imagen en calzoncillos Calvin Klein para todo el mundo, la mayoría de los clubes ahora son propiedad de entidades globales multimillonarias o de fondos soberanos de Oriente Medio y el deporte ya no solo es el opio del pueblo, sino que el fútbol tiene una audiencia millonaria y que recorre todas las clases sociales.

Por suerte o peor desgracia, en España todavía nos tenemos que “conformar” con las comunes Nike (Barça, Atleti, Mallorca), Adidas (Real Madrid), Puma (Valencia, Girona, Alavés), Castore (Athletic), Hummel (Betis, Celta, Las Palmas), Macron (Real Sociedad, Osasuna), Kappa (Valladolid) y Umbro (Rayo), si nos referimos a la Primera División. Habrá que esperar para que la gente de Madrid o de Valencia, por ejemplo, vistan de Dior con la camiseta de su equipo puesta, en el Ciutat o en el Santiago Bernabéu.