Mi Bundesliga
·14 de noviembre de 2021
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·14 de noviembre de 2021
Con la victoria sobre Armenia por 1:4, la Selección Alemana completó las Eliminatorias Europeas de Qatar 2022. Una fase de clasificación donde Alemania dio imágenes sorprendentes para lo bueno y para lo malo, con un cambio de seleccionador incluido.
Los últimos meses de Joachim Löw en el banquillo de la Selección Alemana fueron un cierto anticipo de lo que terminaría siendo el descalabro en la Eurocopa. La imagen de una Alemania poco resolutiva y que cuando resolvía lo hacía sin excesos de brillo ya se vio en los primeros encuentros de las eliminatorias. A una victoria cómoda contra Islandia por 3:0 le siguió un 0:1 sobre la mínima frente a Rumanía.
La nota más negativa fue esa única derrota que cosechó Alemania, de local ante Macedonia del Norte. Las críticas hacia Löw, que ya venían en alza desde lo sucedido en el Mundial de 2018 y sobre todo por la goleada sufrida ante España en la Liga de Naciones varios meses atrás, se intensificaron con este tropiezo ante un rival muy inferior. Además, otra selección del grupo como Armenia había hecho pleno de victorias en el arranque y adelantó a los germanos.
El clima extraño que se vio en estos encuentros se extrapoló a la cita de la Eurocopa, con la marcha de Löw como desenlace y la necesidad de un relevo en la Mannschaft.
A Hansi Flick le tocaba la dura tarea de devolver el colmillo competitivo a Alemania y, visto su trabajo desde su llegada hasta hoy, no ha podido hacerlo de mejor. Seis victorias en los seis partidos oficiales al mando consiguieron que todas las dudas se desvanecieran con un equipo que gusta y convence cada vez más. Tanto es así que este parón de noviembre se afrontaba con la clasificación directa al Mundial completamente asegurada.
El renacer de jugadores como Leroy Sané al mando de Flick y un bloque mucho más unido y vertical han dado lugar a un paseo de Alemania en la mayoría de los partidos con Flick. Los 31 goles anotados en estos seis choques y tan sólo dos encajados hablan muy bien de la superioridad aplastante de la Selección en estos últimos meses.
Es pronto para predecir si esta imagen arrolladora de Alemania la convierte en una de las claras favoritas para ganar el próximo Mundial de Qatar, pero ha quedado claro que Löw ya es pasado y con Flick se ve un futuro mucho más brillante… y quizá con estrellas.