El Almería pide 10 millones por su pilar | OneFootball

Hay rumores que llegan como una caricia y otros que suenan a alarma. En Almería, el posible interés del Saint-Étienne por Dion Lopy pertenece claramente al segundo grupo. Según informan medios franceses, el conjunto andaluz habría tasado a su centrocampista senegalés en torno a los 10 millones de euros. Una cifra importante, seductora incluso. Pero también peligrosa.

Porque el fútbol no es solo contabilidad. Es contexto, es momento y es ambición. Y el Almería se encuentra inmerso en la pelea más exigente de la temporada: la búsqueda del ascenso directo a Primera División.

Lopy, el equilibrio invisible del Almería

Dion Lopy no siempre acapara titulares, pero su importancia en el engranaje rojiblanco es incuestionable. Su capacidad para sostener al equipo desde la base, equilibrar transiciones y dar continuidad al juego le ha convertido en una pieza estructural del centro del campo.

No es casualidad que su rendimiento haya despertado interés fuera de España. Lopy reúne un perfil muy cotizado en el fútbol europeo: físico, lectura táctica y margen de crecimiento. A sus 23 años, su progresión es evidente y su valor de mercado ha ido creciendo temporada tras temporada.

El Saint-Étienne, un histórico del fútbol francés que busca reconstruirse y volver a ser competitivo, ve en él una inversión de presente y futuro.

Diez millones: una cifra que pesa en Segunda

Para un club de LaLiga Hypermotion, una oferta cercana a los 10 millones de euros no es un asunto menor. Sería una de las ventas más importantes de la categoría y supondría un impulso económico notable para las arcas del Almería.

Ese dinero permitiría aliviar cuentas, reforzar otras posiciones e incluso planificar con mayor tranquilidad el futuro a medio plazo. En un fútbol cada vez más condicionado por el equilibrio financiero, decir “no” a una cifra así nunca es sencillo.

Pero el problema no es el dinero. El problema es el cuándo.

El riesgo deportivo de tocar la medular

Vender a Lopy en este momento debilitaría una zona clave del equipo. El centro del campo es el corazón de cualquier aspirante al ascenso y, en una Segunda División tan igualada, perder a un futbolista diferencial puede marcar la diferencia entre subir o quedarse a las puertas.

Sustituir a Lopy no sería fácil ni inmediato. El mercado de invierno, si se produjera la operación ahora, no garantiza soluciones del mismo nivel. Y adaptar a un nuevo mediocentro en plena temporada es un riesgo que pocos entrenadores desean asumir.

El Almería no solo perdería músculo y equilibrio, sino también continuidad en su idea de juego.

Ascender o vender: el eterno dilema

Aquí surge el gran debate. ¿Qué vale más, asegurar una gran venta o proteger el objetivo deportivo? El ascenso a Primera División supone ingresos muy superiores a cualquier traspaso individual, además de prestigio y estabilidad.

Renunciar a Lopy podría interpretarse como una contradicción respecto al mensaje ambicioso que transmite el club. Mantenerlo, en cambio, sería una apuesta clara por el ahora, por creer que este es el año.

El jugador, pieza clave en la decisión

No hay que olvidar un factor decisivo: la voluntad del propio Lopy. Si el futbolista ve con buenos ojos el salto a una liga como la francesa y a un club con historia europea, el escenario cambia. Retener a un jugador que desea salir nunca es sencillo.

El Almería tendrá que gestionar no solo números, sino emociones, expectativas y proyecto.

Un verano que puede cambiarlo todo

Quizá la solución esté en el equilibrio. Resistir ahora, apostar por el ascenso y dejar la operación para el verano, cuando el contexto sea distinto y el margen de maniobra mayor.

Porque hay ventas que enriquecen un club… y otras que pueden costarle un sueño. Y el Almería, hoy, está más cerca de soñar que de hacer caja.