El Girona revive en casa y se permite creer | OneFootball

Finalmente, el Girona puede respirar un poco de aire fresco. El conjunto catalán consiguió su segunda victoria de la temporada y alcanzó los diez puntos, lo que le permite salir de los puestos de descenso y quedarse con el puesto 16 de la clasificación. Los Gironins podrían cerrar una jornada estando fuera de la zona roja por primera vez en toda la campaña; eso sí, todavía tienen que jugar todos sus perseguidores.

Los de Míchel venían de perder dos de sus últimos tres compromisos ligueros, pero habiendo dejado buenas sensaciones durante ciertos tramos -como contra el Barcelona-. Recibían este sábado en casa al Alavés de Eduardo Coudet, una de las revelaciones de esta Liga, que tiene la mira puesta en Europa. Un triunfo acercaba a los vascos a los puestos de Europa League, pero en cambio se llevaron una derrota que pesa y mucho.

En un partido con más bien pocas ocasiones claras, un gol de Tsygankov al minuto 16, con asistencia de Bryan Gil, fue suficiente para decantar la balanza. Los visitantes llegaron a empatarlo en el segundo tiempo gracias a un cabezazo de Antonio Blanco al 55', pero el VAR intercedió a favor de los rojiblancos y anuló el tanto por fuera de juego.

El videoarbitraje volvió a aparecer en los minutos finales para anular un gol de Stuani, que suponía la sentencia final, por fuera de juego del uruguayo. Después de eso, parecían aparecer todos los fantasmas recientes para el Girona, que se aferró con las uñas a la ventaja mínima ante un Alavés obligado a avanzar. El rugido de Montilivi sostuvo a los suyos, que incluso terminó sufriendo poco hasta el pitido final.