El mejor fichaje del Almería, inesperado | OneFootball

A veces los mejores refuerzos no llegan en el mercado. O no al menos en su forma clásica. En ocasiones, ya estaban en el equipo. Adrián Embarba ha demostrado que su continuidad en la UD Almería era la mejor noticia posible para un equipo que buscaba reencontrarse consigo mismo.

El extremo madrileño, que regresó de su cesión en el Rayo Vallecano, atraviesa un momento de forma estelar. Son ya cuatro goles y una asistencia en lo que va de temporada. Números que lo convierten en el futbolista más determinante a las órdenes de Rubi.

Goles, asistencias y algo más

Más allá de los números, que ya son notables —participa directamente en un gol cada 102 minutos de juego—, Embarba es el motor emocional y creativo del equipo. Su capacidad para interpretar los espacios, desbordar en el uno contra uno y poner pausa o acelerar según lo pida el partido ha devuelto a la UD Almería un recurso ofensivo de primer nivel.

Sus cuatro dianas no solo han sumado puntos importantes. Además, han servido para liberar a sus compañeros de presión. Alargando los ataques y evitando que el equipo quede partido. Su experiencia, unida a su gran relación con el gol, son oro en clave almeriense.

El efecto Rubi y el papel de líder

Rubi ha encontrado en Embarba a su extensión en el campo. El técnico ha depositado en él la responsabilidad de liderar la segunda línea ofensiva, acompañado de jóvenes como Melamed o Arribas. El resultado es un equipo más reconocible.

Uno que juega a lo que quiere su entrenador. Presión tras pérdida, ataques verticales y una circulación de balón que busca dañar por bandas. Embarba, con su experiencia y jerarquía, se ha convertido en la brújula de este proyecto. Su importancia ya trasciende y se hace vital. Y la afición se ha reencontrado con su talento.

Un faro para hacer al Almería soñar

El gran reto para el Almería será mantener esta versión del madrileño durante todo el curso. Si su nivel no decae, el conjunto rojiblanco tendrá en él a un jugador diferencial. Uno capaz de decidir partidos y marcar la diferencia en la lucha por el ascenso.

Adrián Embarba no es solo el mejor fichaje de este verano. Es el faro que ilumina el camino de un equipo que quiere volver a brillar en Primera.