El Sevilla Femenino cierra un año en el que ha conseguido constancia y no bajar de las 10 primeras clasificadas. El once propuesto es:
Sullastres: La portera española ha sido fija en el esquema de David Losada disputando 29 encuentro y atajando dos penaltis.
Débora: La catalana, a pesar de las lesiones, ha tratado de estar a la altura durante todo el año. Una lesión la alejó de los terrenos de juego durante 4 meses, pero logró volver a un gran nivel.
Diana: La internacional lusa fue un pilar en el primer tramo del año, se marchó en junio tras vencer su contrato.
Eva: la zaguera ha disputado 26/28 encuentros en los que ha estado disponible. Además, en 23 de ellos salió desde el inicio. Anotó uno gol en Riazor.
Corrales: La jugadora estuvo cedida por el F.C Barcelona Femenino la temporada pasada, en el inicio de 2025 ha disputado todos los encuentros siendo un puñal por el carril izquierdo.
Iris: La asturiana se ha compenetrado las mil maravillas con Alicia, jugando prácticamente todo, Iris ha mantenido con firmeza la medular hispalense.
Alicia Redondo: Pareja de baile de Iris. Entre las dos han sido dueñas y señoras de las posesiones de los de Losada. Ha jugado todo a excepción de 3 encuentros que le tocó verlos desde el banquillo.
Gemma: La castellonense de 31 años llevaba 4 participaciones de gol, pero un duro golpe en agosto la mandó a quirófano. Gemma trabaja duro para volver a la dinámica de grupo con la mayor brevedad posible.
Inma: La delantera sevillana cedida por el Everton está de dulce. Es la máxima goleadora esta temporada con 3 tantos y ha participado en el 37% de los goles anotados cuando ella está jugando.
Raquel: La jugadora de 26 años ha participado en 4 goles en los que va de año. A pesar de no contar con mucho protagonismo al inicio de año, 10 de 12 partidos saliendo como suplente, ha acabado el 2025 con 9 titularidades consecutivas (donde ha marcado dos goles y dado una asistencia).
Padilla: La polaca estuvo cedida por el Bayern de Múnich y en los 16 encuentros que ha jugado este año han marcado la friolera de ocho tantos.