El Mirandés le otorga premio a su destacado central | OneFootball

A veces, un escenario humilde puede convertirse en el mejor escaparate. El CD Mirandés lo ha vuelto a demostrar. La temporada 2024-25 no solo dejó al conjunto rojillo a un paso de la gloria, cayendo con dignidad en el playoff de ascenso. También sirvió para que talentos como Unai Egiluz brillaran con luz propia.

El central vizcaíno, con apenas 24 años, completó una campaña imponente en el eje de la zaga rojilla. Seguro en el corte, contundente por arriba y preciso en la salida de balón, fue una de las revelaciones del curso. Su rendimiento no pasó desapercibido en Lezama. Ahora, el Athletic Club ha movido ficha y ha blindado su contrato hasta 2028.

Valverde toma nota de lo hecho en el Mirandés

Egiluz comenzará la pretemporada 25-26 a las órdenes de Ernesto Valverde, con el objetivo de ganarse un hueco en la plantilla del primer equipo. Una oportunidad que se ha ganado con trabajo silencioso y jerarquía en Miranda de Ebro. Y es que su rendimiento ha sido clave para la solidez defensiva del Mirandés, equipo que sorprendió por su madurez táctica a lo largo del pasado curso.

La dirección deportiva del Athletic valora no solo su nivel actual, sino su potencial. La cesión al Mirandés ha sido un acierto pleno: 38 partidos disputados, más de 3.000 minutos de vuelo competitivo y una madurez que no todos alcanzan tan pronto.

El Mirandés, cuna de talento

No es la primera vez que el Mirandés sirve como trampolín para jugadores del Athletic o de otros grandes. Lo que hace diferente al club jabato es su capacidad para generar un contexto competitivo real, que mide a los jóvenes en escenarios de máxima exigencia. Egiluz lo entendió desde el primer día. Y respondió como se espera de un central de futuro.

En su temporada en Anduva no solo demostró solidez. También liderazgo. Un perfil que escasea en el fútbol moderno, y que el Athletic no está dispuesto a dejar escapar.

Un futuro que se empieza a escribir hoy

La renovación hasta 2028 no es un simple trámite. Es una apuesta clara. Y Egiluz, que ha ganado confianza y galones en Segunda, sabe que el siguiente paso debe darlo en San Mamés. Mientras tanto, en Miranda se celebrará con orgullo. Porque cuando alguien triunfa tras vestir de rojillo, también gana el Mirandés.