El nombre que Rayados analiza para cambiar la historia en 2026 | OneFootball

Monterrey busca respuestas tras otro semestre sin título y el mercado de fichajes ya comenzó a agitarse en la Sultana del Norte

El futbol de estufa en la Liga MX no pierde tiempo y, apenas unas horas después de que el Torneo Apertura 2025 llegó a su fin, Rayados de Monterrey ya comienza a mover piezas con la mira puesta en el Clausura 2026. La eliminación en Semifinales dejó sensaciones encontradas: si bien el equipo logró echar al América de André Jardine, el fracaso volvió a pesar cuando su eterno rival, Tigres, alcanzó otra Final.

En ese contexto, la directiva encabezada por José Antonio “Tato” Noriega sabe que no basta con competir; el objetivo vuelve a ser el título. Por ello, Monterrey ya analiza opciones en el mercado internacional, y un nombre comienza a tomar fuerza como posible refuerzo ofensivo.

Un extranjero para sacudir el proyecto

Rayados busca evitar otro semestre sin levantar la copa y, para ello, el plan pasa por reforzar zonas clave del plantel. Con la salida de Sergio Ramos y el retiro de Héctor Moreno, el club ya contempla sumar un defensor central, pero también entiende que necesita mayor desequilibrio y profundidad por las bandas.

En ese escenario aparece un perfil que gusta en la directiva: un extremo con cambio de ritmo, capacidad de desborde y experiencia internacional. El objetivo es claro: darle a Domenec Torrent más variantes ofensivas y evitar que el equipo vuelva a quedarse corto en partidos decisivos.

El nombre que toma fuerza: Luca Orellano

De acuerdo con información del periodista especializado en fichajes, César Merlo, Rayados ya habría iniciado conversaciones con el FC Cincinnati de la MLS por Luca Nicolás Orellano, extremo argentino de 25 años que ha tenido un crecimiento constante en el futbol estadounidense.

Las charlas existen, aunque todavía no hay un acuerdo cerrado. Como suele suceder en el mercado, nada está definido hasta que haya firmas de por medio. Sin embargo, el simple hecho de que Monterrey haya tocado la puerta confirma que el futbolista está en carpeta como una opción real para reforzar al equipo.

Cruz Azul, atento a cualquier movimiento

El posible fichaje de Orellano no pasa desapercibido para otros clubes de la Liga MX. Cruz Azul aparece como un actor secundario en esta historia, atento a cualquier complicación en las negociaciones entre Rayados y Cincinnati.

No es la primera vez que el nombre del argentino se vincula con el futbol mexicano. Hace aproximadamente un año, su llegada a La Noria fue analizada, aunque la operación no prosperó. Desde entonces, el jugador no ha salido del radar de algunos clubes grandes, lo que añade presión a Monterrey para concretar el movimiento si decide ir con todo.

¿Quién es Luca Orellano?

Formado en las fuerzas básicas de Vélez Sarsfield, Orellano dio el salto al extranjero tras su paso por el futbol argentino y una experiencia en el Vasco da Gama de Brasil. Actualmente milita en el FC Cincinnati, donde ha logrado consolidarse como un atacante versátil y desequilibrante.

En su paso por la MLS acumula 77 partidos, con 15 goles y 11 asistencias, números que reflejan su capacidad para influir en el último tercio del campo. Su edad y proyección lo convierten en un perfil atractivo para un club que busca rendimiento inmediato sin perder margen de crecimiento.

Tras la eliminación ante Toluca y el bicampeonato conseguido por Antonio Mohamed —técnico que en su momento fue opción para el banquillo regio—, Rayados sabe que la exigencia será máxima en 2026. Domenec Torrent ya trabaja en la planificación del próximo torneo con la idea de sumar entre tres y cuatro refuerzos.

Además del posible arribo de Orellano, el club analiza reforzar la zaga central y otras posiciones estratégicas. La consigna es clara: no repetir errores, cerrar mejor los torneos y volver a competir de tú a tú con Tigres, que hoy parece tener mayor estabilidad deportiva.

Por ahora, el mercado apenas comienza, pero en Monterrey el mensaje es evidente: Rayados ya se mueve… y no quiere volver a quedarse atrás.