Santa Fe Deportivo
·29 de abril de 2024
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Carlos Zambrano, defensor de Alianza Lima con pasado en Boca, le tiró un palazo al Xeneize a un poco más de un año de su salida del equipo argentino. El futbolista de 34 años, entre risas, explicó que desde su salida, el club de la Ribera no pudo levantar ningún trofeo. Sin embargo, su dato fue erróneo: conquistó una Supercopa luego de la partida del peruano. Además, habló de la pelea con Darío Benedetto.
Boca tiene la cabeza en Estudiantes, ya que lo enfrentará este martes a las 20.00 por la semifinal de la Copa de la Liga Profesional. Sin embargo, pese a que los focos están en el duelo ante el Pincha, este lunes habló un futbolista que tuvo un paso por el club entre 2020 y algunos días del 2023: Carlos Zambrano.
El peruano, campeón de cínculo títulos en el Xeneize, fue entrevistado por los ex futbolistas Jefferson Farfán y Roberto Guizasola para el canal Enfocados. En lo que fue una nota descontracturada, Zambrano sacó chapa por los trofeos que levantó y aseguró que Boca no volvió a ser campeón, aunque no era correcto.
«Y ahora cuenta cuántos hay desde que me fui. Boca no ha ganado ninguno todavía. Son las estadísticas», sentenció. Sin embargo, este dato es erróneo. Zambrano se marchó en enero del 2023 y Boca venció 3-0 con un hat-trick de Darío Benedetto a Patronato en marzo de ese año para alzarse con la Supercopa Argentina
El peruano recordó su cruce con el delantero en el Cilindro: «Fue la primera vez que perdí. Fue a traición. Se equivocó y lo reconoció en su momento pero yo me quedé con la espina. Yo quería resolverlo en caliente pero Benedetto entró al camerino y me pidió disculpas llorando«. Luego, el defensor detalló como fue la pelea en el túnel de la cancha de Racing.
«Él estaba adelante mío, tirando mierda. Yo le decía: ‘Deja de decir huevadas, siempre la misma mierda contigo. Si vas a decir algo, dilo en el camerino, no adelante de la gente, donde todas las cámaras te están viendo’. Siempre le tiraba mierda a la defensa», relató.
Más adelante, reveló que fueron discutiendo en caliente en el túnel, hasta que el Pipa le golpeó: «Ya estaba todo caliente, nos hablábamos con palabras muy altas. Y ahí volteo y bum: me dio uno de arranque. Yo queiro reaccionar, uno se va para adelante directo, pero los compañeros se meten a separar».
Nos habíamos trenzado un poquito, pero uno se queda con la espina. Y mis compañeros me decían: ‘tienes que mecharlo’. La lógica. ¿Pero que iba a hacer? Estamos entrando el camerino, estaban los dirigentes, estaba el entrenador, faltaba el segundo tiempo…», añadió.
En ese sentido, dejó en claro que «es incómodo que dos compañeros se peleen» y que «se ve muy feo en un equipo». «Se volvió un puterio todo eso, afirmó. Y sentenció: «Despues yo pensaba que iba a llegar el momento para darle la sin razón. Pero nunca llegó. No llegó el momento. Porque en el entrenamiento él era más cordial conmigo. Igual dije, en algún momento iba a haber enfrentamientos delantero – defensor. Estaba esperando el momento, pero no, no me presionaba”.