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·15 de diciembre de 2025
El Racing denuncia al Barça por la venta de Pablo Torre

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·15 de diciembre de 2025

La venta de Pablo Torre al RCD Mallorca, cerrada este verano por 4,95 millones de euros, ha terminado en los despachos de LaLiga. El Racing de Santander, club de origen del centrocampista cántabro, ha denunciado al FC Barcelona al considerar que la operación se diseñó de forma intencionada para evitar el pago de una plusvalía económica que, según su interpretación, les correspondía.
Una operación que había pasado prácticamente desapercibida en el mercado estival ha adquirido ahora un fuerte componente institucional y jurídico, con acusaciones directas de “mala fe” por parte del presidente racinguista, Manolo Higuera, hacia el club azulgrana.
Cuando el Barça fichó a Pablo Torre en 2022 procedente del Racing de Santander, ambas entidades acordaron una serie de variables económicas. Entre ellas, una cláusula clave: el club cántabro recibiría una plusvalía si el futbolista era traspasado por una cantidad igual o superior a 5 millones de euros.
El problema surge porque la venta al Mallorca se cerró por 4,95 millones, es decir, 50.000 euros por debajo del umbral fijado en el contrato. Esa diferencia ha sido suficiente para que el Racing no perciba compensación alguna, algo que considera deliberado.
El presidente del Racing, Manolo Higuera, confirmó públicamente que el club ha enviado un burofax al FC Barcelona y que el conflicto ya se encuentra en la junta arbitral de LaLiga, tal y como recoge el contrato firmado en su día.
“El contrato prevé que la junta arbitral de LaLiga resuelva el conflicto y reclamamos lo que creemos que es un derecho económico sobre este traspaso. Es una operación hecha con mala fe para perjudicar a un tercero”, afirmó Higuera.
Desde Santander consideran que el valor real de la operación es superior al precio oficial comunicado, y sostienen que el Barça ha utilizado mecanismos contractuales para eludir el pago de la plusvalía.
Uno de los argumentos centrales del Racing es que el Barcelona se reservó el 50% de los derechos del jugador, además de pactar una opción de recompra fijada en 10 millones de euros y un porcentaje de una futura venta del Mallorca.
Para el club cántabro, ese precio de recompra refleja la verdadera valoración que el Barça hace de Pablo Torre, por lo que entienden que el traspaso no puede considerarse realmente inferior a los 5 millones pactados.
Además, el Racing sostiene que, en caso de una futura venta del futbolista por parte del Mallorca, la plusvalía debería corresponderles a ellos y no al club azulgrana.
Cuando el Racing vendió a Pablo Torre al Barça en 2022, el acuerdo contemplaba hasta 20 millones de euros en variables. Sin embargo, solo se cumplieron las condiciones necesarias para que el club cántabro percibiera 1 millón de euros.
Esa cantidad se activó porque el centrocampista disputó más de 46 minutos en al menos 10 partidos oficiales con el primer equipo del FC Barcelona. El resto de variables, ligadas a rendimiento deportivo y continuidad, no llegaron a cumplirse.
Según las últimas informaciones, el Barça no está preocupado por la denuncia presentada por el Racing. En el club azulgrana entienden que la operación se ajusta estrictamente a lo firmado en el contrato y que en ningún momento se alcanzó la cifra mínima que activaba la plusvalía.
Desde el entorno barcelonista insisten en que el precio de traspaso fue el acordado con el Mallorca y que las cláusulas adicionales —recompra y derechos futuros— no forman parte del importe fijo de la venta.









































