El Racing ha tardado un año en dejar la portería a cero a domicilio | OneFootball

Victoria colosal de un gran Racing de Santander en Burgos. Los cántabros no solo ganaron sino que hicieron un partido digno de ese otro fútbol que le faltaba en muchas ocasiones. En un partido igualado y muy bronco, supo adelantarse en un saque de banda, sentenciarlo en la segunda parte y hacer que no pasara nada hasta dejando la portería a cero.

Un año justo

El Racing siempre se ha caracterizado por marcar muchos goles pero también por encajarlos. Eso es algo que le perjudicaba cuando no era brillante y le hacía perder puntos. Sin embargo, el otro día en Burgos se vio un Racing diferente. No solo ganó, sino que tiró de oficio, no se desconectó y apenas sufrió por el marcador como otras veces.

Y es que cuando se acercaba el final del partido con 0-2 en el marcador y mirabamos la última portería a cero del Racing a domicilio salió un dato increíble. Ya es difícil que sea tanto tiempo y ya es muy difícil que coincida en el mismo día. Y es que para encontrar el último partido en el que los cántabros no encajaron nos tenemos que ir al 23 de noviembre de 2024 en el 0-0 contra el Málaga, justo un año antes de la victoria en Burgos.

Más partidos como el de Burgos

Pensar que durante un año entero, el Racing, viajaba por los campos de Segunda División y las aficiones celebraban goles en su contra, es duro de asimilar. Ganase, perdiese o empatase, siempre encajaba ya sea para tener que remontar o para perder puntos en el tramo final. Sin duda es una de las tareas a mejorar para el equipo de José Alberto esta temporada.

Son ya casi tres años completos del técnico asturiano en Santander. Pese a que la evolución se ha notado a lo largo de las temporadas, hay muchos aspectos a matizar. Por fútbol y calidad de plantilla no es. El Racing siempre marca y normalmente gana pero no puede permitir que se le escapen puntos por desconexiones. Igual que los jugadores demuestran ser de los mejores de la categoría, tienen que demostrar más oficio y picardía como el otro día en Burgos