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·11 de noviembre de 2025
El Real Madrid busca calma tras dos tropiezos inesperados

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·11 de noviembre de 2025

Un reciente informe reveló la creciente preocupación dentro de la directiva del Real Madrid por la mala racha del equipo. No existe pánico, pero en Valdebebas se percibe inquietud y cierto nerviosismo. La dirigencia confía en que el próximo parón internacional sirva para estabilizar la situación y reorganizar el funcionamiento colectivo.
Después de la emocionante victoria por 2-1 sobre el Barcelona en el Clásico, muchos hinchas esperaban que la racha positiva continuara. Sin embargo, el rendimiento tomó un rumbo inesperado. Los Blancos cayeron 0-1 ante el Liverpool en la Liga de Campeones y luego empataron 0-0 frente al Rayo Vallecano en La Liga.
De acuerdo a SPORT, el repentino declive encendió los interrogantes dentro y fuera del club. En la sala de juntas el mensaje sigue siendo moderado, pero nadie ignora la realidad. Según el informe, los dirigentes esperan que el parón internacional alivie la tensión y permita corregir errores antes de que la situación empeore.
La preocupación es evidente, aunque la confianza en Xabi Alonso se mantiene. La directiva recuerda que el Real Madrid sigue líder de La Liga y entre los ocho mejores de la Champions League. A pesar de eso, también reconocen patrones que recuerdan a las dificultades de la temporada pasada.
Las señales dentro del campo no son alentadoras. “Los dirigentes del Real Madrid están bastante preocupados por el estado de forma actual del equipo”, señala el reporte. Esa frase describe el ambiente con claridad, aunque nadie considere la situación como una crisis definitiva.
El problema central está en el rendimiento de los últimos dos partidos. El equipo mostró una presión desordenada, posesión estéril y ataques sin sorpresa. Esa falta de variantes llevó al conjunto a depender demasiado de los goles de Kylian Mbappé, la velocidad de Vinícius Jr. y las atajadas de Thibaut Courtois.
Algunas voces dentro del club se preguntan si Xabi Alonso ha perdido parte del control táctico que mostraba en sus primeros encuentros. El Real Madrid jugaba con precisión y cohesión, pero ahora parece alejarse de esa identidad. Este cambio genera preocupación en el vestuario y también en la directiva.
Sin embargo, todavía no hay pánico. La posición del club en todas las competiciones sigue siendo competitiva, y el plantel tiene capacidad para reaccionar. La dirigencia apostará por el trabajo de Alonso y espera que el descanso internacional marque un punto de quiebre positivo. Para el Real Madrid, la misión ahora es simple: recuperar la intensidad y volver a dominar.









































