Eric García renueva con el Barça hasta 2031 | OneFootball

El central de Martorell amplía su compromiso con el FC Barcelona hasta 2031

Un premio a un año intachable

La renovación de Eric García hasta 2031 es la consecuencia de su mejor etapa como profesional. No hablamos de un salto repentino, sino de una evolución sostenida. La pasada temporada ya dejó señales claras de crecimiento, pero este curso ha consolidado definitivamente su estatus: es el único jugador de la plantilla que ha participado en los veinte partidos disputados hasta la fecha, siendo titular en la mayoría. La directiva ha utilizado esos minutos —y sobre todo, su rendimiento— como argumento para dar un paso que antes generaba debate y ahora parece natural.

Eric García tras su gol ante el Oviedo. Foto: FC Barcelona.

Negociación resuelta y confianza total de Flick

El acuerdo se ha cerrado tras varias semanas de conversaciones entre Deco e Iván de la Peña, representante del futbolista, y supone también una mejora contractual. Hansi Flick ha sido decisivo. El alemán lo considera imprescindible para su idea de juego y se negó a su salida el pasado verano, incluso cuando el propio Eric contempló volver a Montilivi tras su cesión en Girona. Aquella experiencia lo transformó: jerarquía, madurez competitiva y una lectura defensiva que hoy lo sostienen en la élite. Flick no quería que se marchara porque lo ve como un central para muchos años, no para una temporada.

Versatilidad, compromiso y una resiliencia poco común

Eric ha jugado de central, de lateral derecho, incluso de mediocentro, y en Bélgica continuó compitiendo con una máscara tras romperse la nariz. Eso explica más que mil palabras. El Barça renueva a un jugador que no solo rinde: se entrega. Tiene sentido que la entidad lo ate a largo plazo; es joven, con margen de evolución y con un carácter competitivo que encaja con lo que el club quiere reconstruir.

2031 queda lejos, pero el listón ya está alto

Blindarlo es una declaración de confianza, sí, pero también una exigencia. Eric García ya no renueva por futuro, renueva por presente. Y si mantiene este nivel —o lo eleva— el Barça no solo habrá renovado a un defensa: habrá asegurado a un líder. Dentro del vestuario ya lo sienten así. La afición empieza a verlo también. Y esta firma, lejos de cerrar un ciclo, puede ser el inicio de uno más grande.

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