Franco Mastantuono deja fuera a uno de los grandes fichajes del Real Madrid | OneFootball

El Real Madrid vive un momento especial con Franco Mastantuono, el joven argentino se ha convertido en una de las grandes sorpresas de la temporada. Su fútbol fresco, vertical y con personalidad ha enamorado al madridismo. También a Xabi Alonso, que no ha dudado en darle galones dentro del equipo.

Mastantuono está mostrando su mejor versión, juega con confianza, no se esconde y siempre pide la pelota. Sus conducciones rompen líneas y su visión de juego le permite conectar con los delanteros. Cada vez que pisa el césped, transmite la sensación de que algo va a pasar.

En un vestuario lleno de estrellas, el argentino ha sabido hacerse un hueco. Y lo ha hecho a base de trabajo, intensidad y talento. Xabi Alonso valora esa actitud, porque en el Madrid no basta con el nombre: hay que demostrarlo cada día.

El gran talento de Mastantuono | Getty Images

La otra cara de la moneda: Brahim Díaz

Pero la irrupción de Mastantuono también tiene consecuencias. La principal víctima es Brahim Díaz, el internacional marroquí está perdiendo protagonismo a pasos agigantados. En el derbi frente al Atlético de Madrid, ya partió desde el banquillo y en la goleada al Levante, tampoco sumó minutos.

Brahim ha pasado de ser un jugador importante en determinados tramos de la temporada a convertirse en una opción secundaria. La competencia en el equipo es feroz y, de momento, no está logrando convencer a Xabi Alonso.

Lo más preocupante es su estado anímico. Desde el Mundial de Clubes cree que no tiene oportunidades y ha bajado la intensidad en los entrenamientos. Algo que ha molestado mucho al técnico vasco, que exige máxima implicación incluso en los días más duros.

La difícil situación de Brahim Díaz | Getty Images

Una situación complicada

El panorama para Brahim no es sencillo. El calendario aprieta, pero la confianza del entrenador es clave y ahora mismo, Xabi Alonso apuesta por otros perfiles. Mastantuono aporta juventud y chispa, otros experiencia y regularidad; en ese contexto, Brahim queda en un limbo difícil de superar.

El jugador sabe que cada partido que pasa sin minutos le aleja un poco más de la dinámica competitiva. Y eso, en un club como el Real Madrid, puede convertirse en un círculo difícil de romper. La exigencia es máxima y los huecos, muy limitados.

El reto de reaccionar

La única salida que tiene Brahim es volver a demostrar en cada entrenamiento. Xabi Alonso lo ha dejado claro: el que no compite al máximo en el día a día, no tendrá premio en el fin de semana.

El talento de Brahim es indiscutible, pero ahora necesita carácter. Si quiere revertir la situación, debe recuperar la motivación y aprovechar cualquier minuto que se le ofrezca, porque en un club como el Madrid, todo cambia muy rápido. Hoy la realidad es complicada, pero una buena actuación puede devolverle al foco.