Madrid-Barcelona.com
·18 de diciembre de 2025
Giro radical a la situación de Ansu Fati: Mónaco y FC Barcelona, implicados

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La temporada de Ansu Fati vuelve a dar un giro inesperado. Lo que empezó como una opción para relanzar su carrera se ha convertido en una nueva preocupación para el FC Barcelona. Su cesión al AS Mónaco, pensada como un punto de inflexión, se cierra con más dudas que certezas y un regreso no deseado.
El plan parecía claro, Ansu necesitaba minutos, confianza y continuidad, el Mónaco se presentaba como un entorno competitivo pero menos exigente, ideal para recuperar sensaciones. Sin embargo, la realidad ha sido muy distinta. Las lesiones musculares volvieron a frenarle desde el inicio y le impidieron completar una pretemporada normal, retrasando su debut hasta bien entrado el curso.
Cuando por fin empezó a sumar partidos, mostró destellos y una racha goleadora que alimentó la esperanza. Seis goles en pocos encuentros devolvieron el optimismo y parecían confirmar que Ansu aún tenía mucho que decir, pero ese impulso duró poco. Un nuevo problema físico y un cambio en el banquillo alteraron por completo su situación.
Una cesión que no ha cumplido su objetivo | @AS_Monaco_ES
La destitución de Adi Hütter, su principal valedor, marcó un antes y un después, con la llegada de Sebastien Pocognoli, Ansu pasó a tener un rol prácticamente residual. A pesar de unas estadísticas aceptables, su impacto real fue limitado. Apenas 598 minutos disputados en toda la temporada reflejan una falta de continuidad que ha impedido cualquier evolución real.
En el club monegasco la decisión está tomada, no se ejercerá la opción de compra pactada con el Barça. El rendimiento, unido a su fragilidad física, ha pesado más que su talento. Así, todo apunta a que el jugador regresará a Barcelona el próximo 30 de junio, reabriendo un problema que parecía temporal.
En el FC Barcelona, la situación es clara, Hansi Flick no cuenta con Ansu Fati. El técnico alemán considera que no encaja en su proyecto deportivo y no contempla darle una nueva oportunidad. El extremo tiene contrato hasta 2028, pero su continuidad en la plantilla está descartada.
El gran obstáculo es económico. Ansu tiene uno de los sueldos más altos del vestuario, unos 12 millones anuales, una cifra difícil de asumir para el club. Encontrar un destino que iguale o se acerque a esas condiciones será complicado.
Ansu Fati, que llegó a ser señalado como el heredero natural de Leo Messi, afronta ahora el momento más delicado de su carrera. El talento sigue ahí, pero las lesiones y las decisiones erróneas han marcado su camino. El Barça necesita una solución y el jugador, un nuevo comienzo.
El giro es total. Mónaco no continúa, Flick no confía y el Barça debe mover ficha. El desenlace, aún abierto, será clave tanto para el club como para un futbolista que busca recuperar algo más que minutos: busca recuperar su lugar en el fútbol de élite.









































