Habemus finalísima femenina en Miami | OneFootball

Ari Sánchez y Paula Josemaría se enfrentarán a Gemma Triay y Delfi Brea en la final del Miami P1

Son las mejores y lo han vuelto a demostrar. Las parejas 1 y 2 del circuito femenino de Premier Padel están un escalón por encima del resto. Y hoy, con Miami como testigo privilegiado, ha vuelto a quedar en evidencia. Por ende, en la gran final de mañana, Ari Sánchez y Paula Josemaría se enfrentarán a sus grandes rivales, Gemma Triay y Delfi Brea.

Las dominadoras del circuito, Ari y Paula, abrían la jornada de semifinales con un duelo inédito. Por primera vez, tras la inexistente final de Riad, se veían las caras con Bea González y Claudia Fernández en un partido que se presuponía igualado. Sin embargo, las de Claudio Gilardoni se han encargado de disipar posibles dudas con un apabullante 6-1 en el primer set.

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Inmejorable puesta en escena en unas semifinales. Eso sí, no todo iba a ser coser y cantar. Bea y Claudia reaccionaban con un 4-1 en la segunda manga que parecía indicar que habría un tercer y definitivo set. Pero no iba a ser el caso. La superioridad de Ari y Paula volvía a imponerse con un parcial de cinco juegos consecutivos que ponía el broche de oro a la primera semifinal. Billete a la final de Miami y a esperar rival.

Gemma y Delfi están de dulce

No tardarían mucho en conocer a sus contrincantes. Viejas conocidas que no traen buenos recuerdos para Ari y Paula, y es lógico. Más allá de la final que cayó del lado de Gemma y Delfi en Gijón, no son buenas noticias para nadie cruzarse en el camino con las de Rodri Ovide. Las número 2 van volando, están imparables y mañana disputarán su tercera final consecutiva.

Su paso por Miami está reflejando el gran nivel de un binomio que se unió para hacer grandes cosas y que, de momento, las está haciendo. Hoy, ante Marta Ortega y Sofía Araujo, el marcador de 6-2 y 6-1 habla por sí solo. Solidez, control del juego y dominio aéreo para lograr el pase a una final en la que vuelven a medirse con las poseedoras del trono al que aspiran. ¡El espectáculo está servido!