Madrid-Barcelona.com
·6 de diciembre de 2025
Iba a ser el nuevo Robert Lewandowski, pero Deco lo dejó escapar y ahora brilla en Portugal

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Robert Lewandowski continúa siendo uno de los pilares ofensivos del Barça. Su experiencia, su olfato goleador y su capacidad para mantener la calma en momentos clave lo convierten en una referencia indiscutible.
Sin embargo, el paso del tiempo no perdona, el polaco sigue rindiendo, pero el club sabe que necesita preparar el relevo. Encontrar a un delantero joven capaz de aprender de él y, algún día, ocupar su lugar era una prioridad.
Durante un tiempo, esa opción parecía estar dentro de casa, un jugador de la cantera con un perfil goleador interesante, trabajador y ambicioso. Su nombre empezó a sonar como posible heredero del ‘9’ azulgrana: Pau Víctor. Pero la historia no tuvo el final que muchos imaginaban.
Lewandowski, clave en el Barça | Getty Images
A pesar de su potencial, Pau Víctor nunca encontró un espacio real en el primer equipo. Le faltaron minutos, confianza y continuidad y en un Barça presionado por resultados inmediatos, los jóvenes suelen pagar el precio de la impaciencia. Deco, encargado de la planificación deportiva, no vio claro su encaje y decidió dejarlo salir.
El delantero necesitaba crecer y la falta de oportunidades en Barcelona lo empujó a buscar un nuevo destino. Entonces parecía lógico, pero ahora muchos creen que el Barça dejó escapar a quien podía ser el relevo natural de Lewandowski.
El Braga apostó por Pau Víctor sin dudar. En Portugal ha encontrado lo que en el Barça le faltaba: un entrenador que confía en él y un proyecto que le da margen para equivocarse y mejorar. Su crecimiento ha sido notable.
En un reciente partido ante el Arouca, el de Sant Cugat firmó una actuación sobresaliente… jugando en una posición diferente. Carlos Vicens lo situó como mediocentro ofensivo, más cerca de la creación que del área y ahí sorprendió.
Intervino 84 veces, completó 59 de 64 pases y alcanzó un 85% de acierto en campo rival, no marcó, pero fue elegido MVP del encuentro. Se mostró dinámico, inteligente y trabajador, ganando duelos y provocando faltas en zonas peligrosas. Una versión más completa de sí mismo.
Tras el partido, Pau Víctor declaró sentirse feliz y agradecido por la confianza recibida. Pero también fue autocrítico: reconoció errores, pérdidas de balón y detalles por mejorar. Esa mezcla de ambición y humildad es la que impulsa a los jugadores a crecer.
Mientras tanto, en Barcelona, la pregunta flota en el aire:¿Y si el relevo de Lewandowski ya estaba en casa y se dejó escapar?Hoy Pau Víctor brilla en Portugal. Y el Barça solo puede mirar hacia él con cierta nostalgia.









































