POSTA DEPORTES
·29 de septiembre de 2024
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Estambul, Turquía.- El Fenerbahçe continúa en su persecución al líder de la liga turca, Galatasaray, y logró una valiosa victoria en su enfrentamiento contra el Union Saint-Gilloise. Sin embargo, el protagonismo de la jornada no solo estuvo en el campo, sino en un gesto de su polémico entrenador, José Mourinho, que rápidamente se volvió tendencia en redes sociales.
Dusan Tadic abrió el marcador para el Fenerbahçe en el minuto 63, mientras que el segundo gol fue cortesía de un autogol de Thalisson al minuto 81. Con estos tres puntos, el equipo turco recorta la distancia con el Galatasaray, que empató 3-3 ante el Kasimpasa. Deportivamente, fue una jornada redonda para los de Mourinho, pero la atención mediática se volcó hacia el técnico portugués por un insólito momento en el banquillo.
Durante el segundo tiempo, tras la polémica anulación de un gol de Edin Dzeko y la posterior tarjeta amarilla, Mourinho, frustrado con la decisión, decidió tomar cartas en el asunto de la manera más inesperada. Sacó su portátil y, con total naturalidad, mostró la repetición de la jugada a las cámaras de televisión para dejar clara su disconformidad. Un acto que, como era de esperar, rápidamente se hizo viral en Turquía y en el mundo entero.
Este tipo de acciones no son nuevas para José Mourinho, conocido por su carácter explosivo y su pasión inigualable. Lo que queda claro es que, más allá de los resultados, 'The Special One' siempre encuentra la manera de robarse el show, y esta vez, con un simple portátil, dejó una huella que pocos olvidarán en la temporada del Fenerbahçe.
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