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Alejandro Diago González·1 de julio de 2024
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Alejandro Diago González·1 de julio de 2024
Pese a que hubo unos primeros minutos en los que España buscó el gol con ahínco, el primer ataque de Georgia supuso un cambio de planes para la idea de la selección española. Pero fue en ese momento cuando el equipo de Luis de la Fuente encontró la calma en medio de la tempestad.
Luis de la Fuente lo reconoció después del partido. La cita ante Georgia era ese momento en el que si no salían las cosas como estaban establecidas, España acabaría en problemas. Sin embargo, el técnico riojano sabía que era el momento de poner la calma. Y así es como España recobró el rumbo tras un momento de tempestad y zozobra. “El resto del encuentro fue manejado desde la tranquilidad y el dominio consciente”, comentó tras el partido.
Un contratiempo que ayudó a la selección a crecer. “Estas situaciones nos hacen cada día un poco mejor”, remarcó de la Fuente. Un seleccionador que tenía preparado en su libreto la situación para evitar que España cayera en la desesperación tras el gol rival: la normalidad y la calma. No es anómalo el que una selección menor y con menos presión golpee primero.
“Esas circunstancias te permiten afrontar cualquier característica con mejor situación emocional y futbolística”, destacó el seleccionador. Y es que con cada vez menos equipos en el torneo, estas situaciones van a ser comunes. Pero para ello hay un elemento que puede ser decisivo: la determinación del equipo.
“Todos tenemos un potencial tremendo y armas muy poderosas. Lo que de alguna manera determina que un equipo es fuerte y seguro es que sabes remar a contracorriente. Y este equipo lo ha hecho”, apuntó un Luis de la Fuente plagado de ambición para el próximo partido. Alemania espera. Y Luis de la Fuente no renuncia a nada.