Anfield Index
·15 de diciembre de 2025
La estrella del Liverpool rinde como un jugador de £100m y costó nada

In partnership with
Yahoo sportsAnfield Index
·15 de diciembre de 2025

El Liverpool ha logrado discretamente algo que la mayoría de los clubes de élite pasan años persiguiendo y cientos de millones intentando fabricar. En un mercado de fichajes dominado por el aumento de las tarifas y el cortoplacismo, el club posee ahora a un centrocampista valorado en el rango de £100m que llegó sin negociación de traspaso, sin batalla con agentes y sin que se firmara un cheque.
Curtis Jones es la encarnación de la antigua creencia del Liverpool en el desarrollo interno. En un momento en que el mercado infla el potencial con la misma agresividad que la calidad probada, el jugador de 23 años ha surgido como una figura central en el equipo en evolución de Arne Slot, no como una promesa, sino como un pilar.
No ha sido un ascenso repentino ni una elevación sentimental. Ha sido ganado, medido y cada vez más respaldado por datos de rendimiento y responsabilidad táctica.

Foto: IMAGO
La llegada de Slot trajo consigo una incertidumbre inevitable. Ideas nuevas, estructuras alteradas y una exigencia de centrocampistas capaces de controlar los partidos en lugar de simplemente sobrevivirlos. Jones ha prosperado en ese entorno.
En las últimas dos semanas, en particular, el equilibrio del centro del campo del Liverpool ha pivotado a su alrededor. Ha actuado como el conector entre defensa y ataque, dictando el ritmo y aportando disciplina posicional, sin dejar de ofrecer incisión con balón.
El sistema de Slot exige inteligencia más que alarde. Jones lee el espacio excepcionalmente bien, sabe cuándo acelerar el juego y, fundamentalmente, cuándo frenarlo. Ese control ha permitido al Liverpool estabilizar sus actuaciones durante una exigente racha de partidos y ha ayudado a que otros florezcan a su alrededor.

El perfil estadístico que ahora acompaña a Jones lo sitúa en una compañía poco común. En la Premier League esta temporada, promedia 8.5 pases progresivos por 90 minutos, una cifra superada solo por Adam Wharton y Bruno Fernandes.
Lo que eleva aún más ese rendimiento es la precisión. Jones está completando el 91.55 por ciento de sus pases, la tasa más alta entre los centrocampistas que han disputado al menos 500 minutos de liga esta temporada. Esa combinación de volumen y eficiencia suele asociarse con los mediocampistas más codiciados de Europa.
Los jugadores que producen perfiles similares exigen valoraciones de nueve cifras. Vitinha, por ejemplo, está ampliamente tasado en más de £100m. Desde la perspectiva del mercado, Jones pertenece ahora a esa conversación, no hipotéticamente, sino de manera tangible.
La resistencia del Liverpool a una actividad excesiva en el mercado siempre ha estado basada en la convicción más que en la contención. La inversión se realiza cuando es necesaria, pero el club ha priorizado de forma constante las vías de desarrollo desde Kirkby hasta Anfield.
Jones representa el resultado ideal de esa filosofía. Un jugador local que entiende el peso de la camiseta, que expresa públicamente su importancia y lo demuestra en privado mediante la constancia y el profesionalismo.
También hay una realidad financiera que sustenta este éxito. En una era marcada por las normas de sostenibilidad y márgenes más estrechos, producir talento de élite internamente no es solo deseable, es esencial. Un activo de £100m desarrollado en casa proporciona una ventaja competitiva dentro y fuera del campo.
La valoración en el fútbol es fluida, influida por la edad, la duración del contrato, las métricas de rendimiento y la escasez en el mercado. Jones marca cada casilla. Está entrando en su prime, ofreciendo cifras de élite, es tácticamente indispensable y está ligado al club sin el riesgo de depreciación asociado a los traspasos elevados.
Para el Liverpool, no se trata de vender. Se trata de reconocer el valor ya asegurado. Jones no es un proyecto a futuro ni una opción de rotación. Ahora es integral para el funcionamiento de este equipo.
Slot ha heredado una plantilla en transición, pero dentro de ella hay un centrocampista hecho a la medida para las exigencias del fútbol de élite moderno. Hay una lección silenciosa aquí, una que el Liverpool ya aprendió antes. Mientras otros buscan soluciones fuera, a veces la respuesta ya está incrustada dentro de los muros de Kirkby.
Curtis Jones no le costó nada al Liverpool. Su valor actual sugiere lo contrario.
Este artículo fue traducido al español por inteligencia artificial. Puedes leer la versión original en 🏴 en este enlace.









































