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leocabrera·20 de enero de 2023
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leocabrera·20 de enero de 2023
Parece paradójico, pero mientras Pellegrino se queja de lo ajustado del presupuesto de la U, lo que le ha impedido reforzar el plantel como hubiera deseado, el club mantiene sueldos muy elevados de jugadores que no serán tenidos en cuenta en el plantel, como Marcelo Cañete y Nahuel Luján.
«Económicamente, el club está justo con el presupuesto. Entonces se nos hace difícil buscar posibilidades donde no podemos. Tenemos que usar el ingenio…», aseguró recientemente el entrenador argentino. En paralelo, el representante de Marcelo Cañete aseguró que lo que está dificultando la salida del jugador es, precisamente, que «no hay muchos clubes que paguen lo de la U en Chile… y en Argentina menos».
Así lo señaló Lucas Fauro, agente de Cañete, en charla con Al Aire Libre en Cooperativa: «El problema es que la U no lo quiere usar, estamos tratando de buscarle una salida, pero está complicado (…) Hay algunos clubes interesados, pero estamos tratando de buscarle la vuelta para que todos queden conformes». Según La Tercera, el salario de Cañete es de unos 20 mil dólares mensuales, es decir, unos 16,5 millones de pesos.
En tanto, el salario de Nahuel Luján, otro de los prescindibles para Pellegrino, se ubica en el entorno de los 13 mil dólares mensuales (unos 11 millones de pesos). Dada la dificultad que la U está encontrando para cederlos a préstamo (las chances de venderlos son bastante más remotas), la única posibilidad que queda es la de llegar a un acuerdo de rescisión. Para ello, el club debería pagarles el total de sus contratos que concluyen el 31 de diciembre de este año, es decir, casi 330 millones de pesos (unos 400 mil dólares).
«Obviamente el club necesita desprenderse del jugador, pero está trabado ese tema. Si no sale nada y se tiene que quedar, lo hará. Es como todo trabajo ya que aún mantiene vigente un año de contrato», advirtió el representante de Cañete. Así está la situación: la U gastaría este año una cifra millonaria en jugadores que no jugarán, a la vez que no puede contratar nuevos jugadores por falta de recursos. ¿Paradójico?