Madrid-Barcelona.com
·20 de octubre de 2025
Laporta invita a Florentino a enviar otro informe a la FIFA sobre el partido de Getafe y las expulsiones

In partnership with
Yahoo sportsMadrid-Barcelona.com
·20 de octubre de 2025
Joan Laporta volvió a hablar alto y claro. Durante la Asamblea del Barça, el presidente culé no se mordió la lengua al referirse a los arbitrajes que el club viene sufriendo. “Si no hay una mano blanca en el arbitraje, lo parece”, lanzó con ironía y rabia contenida.
La frase resonó entre los socios, cansados de una sensación repetida: cada jornada, un episodio nuevo que perjudica al Barça y beneficia al eterno rival.
El detonante fue el último partido ante el Girona. Un duelo intenso que terminó con la expulsión de Hansi Flick por protestar una decisión más que discutible. No hubo insultos ni menosprecio, solo una reacción humana ante lo que consideró un error evidente del colegiado Gil Manzano.
El dato es escalofriante. Gil Manzano ha dirigido 44 partidos del Barça en Primera División… y ha expulsado a 12 jugadores culés.
Una media de una roja cada tres encuentros y medio. Ningún otro equipo se acerca a esas cifras.
En el vestuario blaugrana ya no lo ven como una coincidencia, sino como una tendencia preocupante.
En su lista de expulsados figuran nombres de peso: Messi, Suárez, Neymar, Lewandowski, Dani Alves, Lenglet, Sergi Roberto, Piqué o incluso Szczesny. La sensación es que el colegiado extremeño llega a los partidos con el silbato cargado y la tarjeta roja en el bolsillo, listo para mantener una “tradición” que siempre acaba igual.
Tras el Getafe-Real Madrid, Laporta no pudo evitar lanzar una indirecta envenenada a Florentino Pérez. “Quizá podría enviar otro informe a la FIFA sobre los jugadores expulsados a los rivales del Real Madrid”, comentó con sarcasmo en privado.
Un dardo claro hacia la costumbre del club blanco de mover hilos en los despachos cuando algo no le gusta. Laporta no olvida el informe enviado por Florentino a la FIFA quejándose de los expulsados en los rivales del Barça.
En el Barça creen que existe una evidente doble vara de medir. Mientras a los azulgranas se les castiga con rigor extremo, los rivales del Real Madrid suelen terminar con un jugador menos o con penaltis en contra que resuelven partidos complicados.
En Madrid aseguran que las expulsiones del Getafe fueron justas y que el árbitro solo aplicó el reglamento. Pero cuando se trata de analizar las decisiones que afectan al Barça, las tornas cambian. Entonces todo se justifica y todo vale.
Laporta, fiel a su estilo, no se esconde. Sabe que levantar la voz tiene consecuencias, pero también que el silencio sería aún peor.
“No queremos ayudas, solo igualdad”, repite una y otra vez en su entorno. En el Camp Nou se respira frustración, pero también una sensación de unidad frente a lo que consideran un trato desigual.
Y es que el discurso de Laporta no nace de la rabia del momento, sino de años de agravios acumulados. El presidente no solo habla por Flick o por las rojas recientes. Habla por una historia entera de decisiones que siempre parecen caer del mismo lado.
Y qué casualidad que Flick no pueda sentarse en el banquillo del Bernabéu durante el clásico. No es la primera vez, ni será la última.
En el Camp Nou hablan de mano blanca, premeditación y alevosía de Gil Manzano.
En vivo