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·9 de diciembre de 2025
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En lo deportivo, el FC Bayern se vio momentáneamente por detrás contra el Sporting unos diez minutos después del descanso debido a un gol en propia puerta de Joshua Kimmich. Sin embargo, el imponente espectáculo pirotécnico de los aficionados no cayó en el olvido.
Apenas unos segundos después de que el árbitro Nicholas Walsh diera inicio a la segunda parte de un partido hasta entonces sin goles, los seguidores del histórico campeón alemán encendieron abundante pirotecnia y convirtieron la arena en un mar de luces colorido y parpadeante.



Y quizá este apoyo tremendo también contribuyó a que el Bayern asimilara rápidamente la desventaja y no solo empatara por medio de Gnabry (65’), sino que diera la vuelta al partido cuatro minutos después: la revelación Lennart Karls marcó el 2-1 para los locales. Jonathan Tah amplió poco después la ventaja hasta el 3-1 (77’).
Este artículo fue traducido al español por inteligencia artificial. Puedes leer la versión original en 🇩🇪 en este enlace.
📸 Alexander Hassenstein - 2025 Getty Images
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